𝒮𝑜𝓁𝑜 𝓂𝒾́𝒶【Venlumi】

♥Eres mía y solamente mía♥

¿¡Eh!?

¿¡Donde estoy!?

Lumine estaba abriendo sus ojos, despertándose de un largo sueño sin acordarse de lo anterior. Estaba al parecer en una sala desconocida; todo estaba muy oscuro, sin ninguna brisa de viento que recorriera alrededor y sin una pisca de luz que alumbrara la habitación.

Cuando la rubia trato de levantarse de la silla, siente como algo duro y apretado sujetaba su cintura y sus piernas. Ella miro hacia abajo, ve como varias cadenas estaba sujetándola a la silla; trato de moverse para tratar de salir de ahí, pero era imposible, las cadenas estaba atadas muy fuerte para que no tratara de escarpar.

_ ¡¡AYUDA!!_ Grito desesperada, su voz hacia eco en la habitación, trato de gritar más fuerte para ver si alguien la socorriera, pero apenas podía levantar la voz.

Lumine hizo una mueca de dolor, por alguna razón su garganta estaba doliendo que apenas podía levantar la voz.
Sin embargo lo poco que puedo gritar, no le sirvieron de nada; lamentablemente no pudo escuchar ninguna sola alma, todo estaba muy silencioso, hasta ahora.....

Desde el fondo de la habitación, pudo escuchar que alguien estaba abriendo la puerta. Ella levanto rápido la mirada.
La persona desconocida cerró la puerta atrás suyo y se acerca donde estaba ella, haciéndose visible.

_ ¿¡Venti!?_

La persona que se acercó no era más que Venti, el Arconte Anemo o también conocido como Barbatos.

_ ¡Venti gracias a dios, tiene que sacarme de aquí, no se quien me encerró o como termine aquí. Por favor tienes que sacarme...!_

De repente, Lumine fue interrumpida por su extraña sonrisa. El bardo verde se empezó a reírse mientras la rubia lo miro confundida.

_ ¡Veo que ya despertaste; me tenia un poco preocupado, sabes, no había despertado durante 3 día!_

Los ojos de Lumine se abren aterrada. No sólo no sabía por que estaba así, sino que también estaba inconsciente durante 3 días. ¿Qué estaba pasando?

_ ¡Veo que te he dejado sin palabras, pero eso ya no importa!_

Venti se estaba acercando a la figura atada a la silla. Lumine no sabia por que, pero una mala sensación de peligro comenzó a recoger dentro de ella cuando uno de sus mejores amigos se acercó a su posición.
El pelo bicolor sin pensarlo dos veces, agarrar su mejilla con fuerza para que esta no tratará de desviar su mirada.

_ ¡Eres muy bonita estando tan indefensa enfrente de mi, lamentablemente eso de dejarte salir de aquí, no se va a poder cariño!_

Lumine empezó a temblar, el chico bicolor desprendía un aura que le daba ganas de alejarse de el. Cuando la chica iba a hablar; Venti la interrumpe, juntando su labios con ella.

Para Venti era un sueño hecho realidad, su labios era perfectamente a como se lo imaginaba; eran muy suaves, además su hermoso sabor a fresa era muy embriagado y adictivo, lo estaba volviendo loco. Pero por parte de Lumine, ella no estaba muy contenta con lo que estaba pasando; quería separarse urgentemente de el, pero la atadura en la silla no le permitía.