"Es inusual, bueno, creo que nunca alguien, de los muchos hombres con los que he estado, se ha preocupado por mi placer; así que sería cortés agradecerte, sin embargo, es hipócrita por haberte robado.
No me malinterpretes, no me arrepiento, tenías bastante dinero.
Pd. Deje un poco.
Pd2. Me llevé también tu reloj.
Pd3. Lamento lo de las esposas, detective, es la costumbre.-L. xx"
Palabras delicadamente escritas en el tablón de notas del hotel con una sutil caligrafía.
Louis nunca, jamás de los jamases, había dejado una nota a alguna de sus presas, pero había algo en este, algo en este detective que se le hacía diferente, inusual, interesante; aunque claro que el hecho de que sea un detective es una buena razón para meterle una paliza a Niall, ¿Cómo se le ocurre mandar a uno de sus compañeros de trabajo haciéndolo pasar por una presa?.
Porque ese era el trato que tenían; Niall mandaba a sus criminales hacia un prostíbulo y le pagaba al dueño de dicho lugar para que cuando le pidiera una prostituta (Eleanor, compañera de Louis y su probablemente única amiga) o prostituto (Louis) este le entregara a sus, como el les decía, "nenes".
El protocolo era simple; seducirlos, acostarse con ellos, dormirlos, esposarlos y marcharse, eso si, dejar su marca para reconocer un cual debe pagarle. Eleanor dejaba mariposas de papel en la puerta del baño, Louis dejaba cartas de naipe pegadas a la pared a lado de la cama, pero no cualquier carta; Louis dejaba comodines.
No era parte del protocolo robar, pero si los billetes están ahí, y no los necesitaran en prisión, seria una lastima desperdiciarlos.
Louis siguió la rutina, algo adolorido y cansado pero la siguió; lo esposó con cautela y colgó la llave tan cerca para que pudiera verla y creer que podría alcanzarla, pero lo suficientemente lejos para que le fuera imposible; se tomó su tiempo para admirar al hombre con el que había pasado la noche y por primera vez en años, Lou sintió una pequeña espina en el pecho.
No cambiaba en nada, igual lo entregaría, igual le robaría, igual... el no se acordaría de Louis.
Y con ese pensamiento salió de la habitación, enviando como siempre un "listo" a Niall, en menos de 10 minutos, Lucio, el chofer de Niall pasaba por Louis, y dentro, una cansada Eleanor desmaquillándose.
Lou entró al auto y se recostó en la puerta.
-Gracias, Lucio- agradeció con voz cansada.
-¿Mala noche, dulzura?- Preguntó la chica mientras el auto se ponía en marcha.
-Me duele el culo- contestó amargo, pero su amiga quería amenizar la ya tan tediosa noche de su tediosa y dolorosamente necesitada vida. Nada de esto hubiera pasado de no ser por aquella estúpida placa.
Había empezado a llover en la ciudad, y con eso, comenzó una carrera de gotas de agua en la ventana del auto.
-Suertudo. Juro que nunca había acabado un trabajo tan rápido.
Louis soltó una pequeña risa, sabía cómo se sentía aquello.
-Si bueno, hoy fue... extraño.
-No me digas que tenía algún tipo de fetiche raro, recuerda como te fue con el de las paletas.
-Bueno no así de raro. Solo... no lo sé... diferente. Curioso.
-Ya, bueno, como digas, dulce.
El transcurso de veinte minutos hacia el edificio en el que ambos vivían siguió en silencio. Apenas en el ascensor cruzaron un par de palabras sobre la noche de Ele.
Al llegar a su apartamento, Louis guardó su gabardina en el cuarto que mantiene bajo llave, no quería otro accidente. Tomó un largo y reconfortante baño con una copa de vino mientras sentía como el agua purificaba su piel, esa podía mantenerla limpia, ojalá pudiese decir lo mismo de su conciencia.
El detective Styles despertó con una fuerte resaca y aún más fuerte dolor en la muñeca. Estaba claro, nunca, jamás, ni en un millón de años le volvería a hacer caso a Horan.Así estuvo la cosa; Horan le dijo que se veía bastante tenso, y finalmente cedió de que, tal vez, un prostíbulo no era la peor de las opciones; si, era un detective en un lugar ilegal de profesiones ilegales, trafico de solo Dios sabrá que sustancias, lugar de encuentro de varios delincuentes...
Okay si, fue bastante difícil ceder pero ¿Qué tenia que perder?, además de la moralidad de su trabajo, el profesionalismo, tal vez la dignidad... ¡Bueno ya!, no lo mortifiquemos más al pobre detective.
Como decía, el detective despertó con hematomas amoratados por su tersa piel y uno rojizo brillante sobre la muñeca a causa de metal barato de las esposas. Ignorando su resaca, el detective procedió a analizar la situación en la que se encontraba.
No había traído consigo las esposas; el hombre de anoche ya no estaba; a juzgar por el sol, pasaban de las diez de la mañana; estaba desnudo y no recordaba realmente mucho después de la una de la mañana. Había un vaso de whiskey casi vacío sobre el escritorio, le dolía la pija y la espalda, su ropa estaba en el piso, su placa y su cartera lanzadas sobre su pantalón, y no tenía su reloj, genial, le robaron el maldito reloj.
A probablemente metro y medio de la cama se podía ver un destello sobre el suelo, para ser un ladrón es bastante estupido, dejo la llave en el suelo y sus huellas por todas partes, solo tiene que llamar a... mierda su teléfono está en el escritorio, bien, solo debe tomar la llave.
-Bien, Styles, puedes hacerlo- se dijo aún con voz ronca, bajando de la cama y tratando de alcanzar la llave con la punta de sus pies, lamentablemente, la llave quedaba a unos diez centímetros de donde su pie llegaba.
-¡Maldita suerte! - O maldito Louis, solo que no lo sabe.
Después de media hora tratando de alcanzar su llave, se dio por vencido y calló de nuevo en la cama, dispuesto a pedir auxilio cuando de pronto el picaporte empezó a moverse abriendo la puerta...
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Voten y comenten si les gusta y cualquier falta de ortografía o de gramática
M x.
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♠ ️🃏 Comodín 🃏 ♠ ️ Larry Stylinson
FanfictionDetective Styles; persiguiendo a la mafia, buscando un eslabón desequilibrado, y tenía a la persona perfecta: Zayn Malik, si lo atrapa a él, los atrapa a todos. Detective Horan; reconocido por atrapar a los criminales más buscados en cuestión de día...