Entrenamiento de Tres

Este OneShot es para Xeina Phi, como regalo navideño de la actividad Amigo invisible del club de lectura de Fanfiction. Espero que te guste. Felices fiestas, un abrazo.

Todas las mañanas, Sasuke veía correr al chico rubio por la pista del parque frente al conjunto habitacional desde su ventana. Notó que usaba unos shorts muy cortos que dejaban al descubierto aquellas piernas bien trabajadas y una sport naranja pegada al cuerpo que resaltaba sus enormes pectorales. Observaba cada parte de ese cuerpo muy bien torneado y con unos glúteos de acero.

Después de mirar unos minutos a tan majestuoso ser, se preparaba para ir a su trabajo en una tienda departamental cerca de ahí.

[...]

—Vamos pedazo de animal, Aiiih...—se quejaba Sakura. —¿Por qué sólo yo tengo que hacerme cargo de ti? La Inopuerka dijo que te cuidaremos entre las dos. ¡Si! vamos hay que adoptarlo, está solito, no tiene a dónde ir, se morirá de frío~, bla bla bla...—canturreaba con un deje de molestia. —Ni una sola vez te ha sacado a hacer tus necesidades en las mañanas. Mientras ella se excusa en que está muy cansada por su trabajo, claro, su trabajo de mesera cabaretera... Pero bueno, ¿qué le vamos a hacer? –dijo suspirando y tomando al cachorrito de las riendas. —Después de todo, eres muy lindo, ¿verdad que sí? Vamos, ¿quién es lindo? , ¿quién es lindo? Tú Jack, tú lo eres.

El cachorro después de olfatear varios árboles y defecar en algunas flores, corrió brincando hacia la pista de tartán para ver a las personas que pasaban.

—¡Espera Jack! No te vayas, Aiiih... ¡ven, ya es hora de irnos a Caaaa-saaaa! —dijo asombrada al ver pasar al rubio musculoso delante de ella. – ¡Ay, pero mira nada más el hueso que te encontraste, Jack! —dijo Sakura. —¡Muy bien hecho, muchacho! Pensándolo bien, vamos a esperar un rato más aquí.

Estuvo jugando un poco con Jack mientras esperaba volver a ver pasar a aquel rubio. Miró su reloj, ya era tarde y tenía que ir a alistarse para ir a su trabajo como vendedora de perfumes en la tienda departamental.

—Vámonos Jack, espero que lo volvamos a ver mañana. Eres un buen rastreador, hoy te daré ración doble por eso.

[...]

—¡Buenos días, Sasuke! Aquí tienes tu desayuno como todos los días. Me aseguré de poner un par de tomatillos de los que tanto te gustan.

—¡Gracias, Teuchi-san!

—No tienes que agradecer, eres uno de mis mejores clientes.

—Tsk, hora de irme, casi son las nueve.

—¡Anda, anda! El tiempo es oro.

Se encaminó a salir del establecimiento cuando de repente vio un anuncio en la mampara de menús.

"Kurama Gym. El próximo sábado será la gran reinauguración.

50% de descuento a las primeras 10 personas en inscribirse. Instructor certificado Uzumaki Naruto"

En la parte baja del póster, con una gran sonrisa y levantando el pulgar, se encontraba el chico rubio. Aquel dios griego que veía correr todas las mañanas.

—¿En dónde queda este nuevo gym Teuchi-san?

—Está a 2 cuadras hacia el sur, cruzando el parque. El chico de la foto vino a la hora que abro el local a pedirme que le dejara poner su anuncio, se veía muy entusiasmado. Está muy buena la promoción. Yo ya soy muy grande para eso. Pero, ¿qué me dices tú, Sasuke? Se ve muy bueno, ¿no es así?

<<Si, suena bien... Bueno, es tarde. Debo ajustar mis horarios y lo de la mensualidad>> pensó.

—¡Hasta luego, Sasuke!