𝐩𝐫𝐞𝐬𝐬 𝐩𝐥𝐚𝐲 ► 𝑯𝒚𝒖𝒏𝒍𝒊𝒙

𝐎𝐧𝐥𝐲

Aclaración; Felix es rubio y Hyunjin pelinegro

Te iba a dejar por dos semanas.

Empezando el día de tu cumpleaños.

¿Cómo se atrevió?

─ ¡Lo siento! Realmente no pude opinar al respecto. ─ Felix retrocedió levemente para alejarse de tu ira.

Hmph. Te quejaste.

Changbin intervino para romper la creciente tensión.

─ No deberías ser tan duro con Felix, Hyunjin.

─ Sí, sí, Hyunjin. Felix dijo que no tiene elección. ─ Dijo Minho después de comer un poco de su pollo frito.

─ Por alguna razón, que Minho me defienda no me hace sentir nada seguro. ─ Felix hizo un mohín mientras miraba dudosamente a su amigo.

Tus cejas se fruncieron al escuchar el automático quejido de Felix.

─ Pero juro que te protegeré.

─ Sí, sí...

─ Creo que Minho tiene razón, Hyunjin. ─ Han no pudo ni terminar su oración cuando lo miraste.

─ ¡Ahh, Hyunjin! ¡No seas tan malo con mi Han!

La mirada fija en tu rostro se suavizó. ¿Acaso tú, Hwang Hyunjin, el amigo más amoroso del grupo, miraste con furia a Han?

El chico de piel suave como de bebé se veía un poco deprimido por la penetrante mirada que le habías mostrado.

─ L-lo siento, Han. ─ Tartamudeaste, sintiéndote culpable por hacerlo sentir mal.

─ Ahora ya sabes con qué tipo de mirada debo lidi-

─ Nos estamos yendo del tema de nuevo, Felix. ─ Interrumpiste y cruzaste tus brazos. Estabas más enojado que desde... la semana pasada. Era difícil no verte alterado con Felix y Changbin juntos. En especial cuando se abrazaban o se miraban demasiado. ─ ¿Desde cuándo sabías que te ibas?

─ Ehm... ¿Cómo una semana? ─ Alcanzó a decir.

─ ¿Y no nos dijiste?

─ ¡Estaba ocupado! ─ Gritó impotentemente, despeinando su cabello con frustración.

─ ¿Por qué no dejamos a Felix un momento en paz? ─ Dijo Bangchan tratando de calmar las cosas.

Hmm...

Decidiste interrogarlo un poco más.

─ ¿Ocupado con qué exactamente? Incluso te libramos de las prácticas la semana pasada. ─ Agregaste un tono molesto a esas palabras.

Los demás chicos permanecieron en silencio. Conocían ese lado tuyo y sabían que no debían intervenir.

─ Estaba... haciendo algo. ─ De repente Felix se quedó extrañamente en silencio, mirando a nadie más que a ti.

─ ¿Haciendo algo...?

─ ¡Sí! ¡Pronto lo descubrirás, así que deja de insistir! ─ Frustrado y sin energía, el chico se dejó caer en la mesa.

Te sentiste triunfante por su derrota pero eso no alivió tu molestia.

Felix jamás se había perdido ninguno de tus cumpleaños desde que se conocieron.

─ Bien. ─ Dijiste con tono de molestia una vez más y agarraste una lata de Coca-Cola que tenías enfrente para tomar del líquido vigorizante que vagamente olía bien. Esperando que eso aliviara tu hipertensión.