"Suave brisa"
.
.
.
.
.
Un chica de altura promedio, ni tan alta ni tan baja quizás de unos 1.65 metros caminaba tranquilamente por un parque que estaba cerca de su hogar, llevaba puesto un sweater color lavanda, abajo de esta una camiseta blanca con una falda de cintura alta color negro que le llegaba un poco más arriba de las rodillas (si no les gustan las faldas pueden cambiarlo por un pantalón de su preferencia) con sus botines preferidos del mismo color de su falda, su cabello que no era ni tan largo ni tan corto bailaba junto a la suave brisa, lleva consigo su pequeño bolso/maletín/morral negro donde solo cabía su teléfono, las llaves de su departamento y cosas pequeñas como bálsamo de labios y pequeños accesorios, de igual forma era todo lo que necesitaba, la chica iba perdida en sus pensamientos pero un pequeño ladrido la saco de sus pensamientos
-¿Que sucede cielo? -Vio a su pequeño, bueno, no tan pequeño pastor australiano, el cual la gente lo confundía con un husky siberiano por sus ojos celestes y pelaje blanco con negro. -
- ¡Woof! -Su compañero solo le respondió con un sonoro ladrido mientras daba una vuelta en su propio eje. -
Su dueña sonrió enternecida acariciando la panza de su compañerito, hasta que escucho su nombre a lo lejos
- ¡_____! -La nombrada voltio a mirar encontrandosé a aquel chico que no salía de su cabeza .- Me alegra verte, otra vez -Sonrió amable el joven de cabellos oscuros y ojos grises por los lentes de contacto que usaba la mayoría del tiempo. -
- Digo lo mismo Jimin, también me alegra verte Ddosun - Dijo mientras se ponía a la altura del pequeño samoyedo para acariciar su cabeza ganándose un pequeño beso del ya mencionado. -
_____ había conocido a Jimin hace ya dos semanas, fue pura casualidad, ella se encontraba caminando con su "pedacito de cielo" así es como llamaba a su fiel amigo, cuando una bola de pelos blanquecinos la tiró al piso, cuando alzó la mirada vio a un chico de aproximadamente 20 años que la miraba con una clara preocupación, después de una disculpa de aquel chico intercambiaron una que otra palabra, desde ahí todos o casi todos los días se veía en aquel parque para bolitas de pelo
- ¿Vas a salir hoy? -
- No, ¿Por qué preguntas? -Respondió ____ lanzando una pelota para ser seguida por su eufórico trocito de cielo, Sky.
- Bueno resulta que no tengo clases así que pensaba en ir al karaoke ¿Me acompañas? -Respondió Jimin con un suave rubor en sus mejillas debido a sus nervios.
- Me encantaria ¿A que horas sería? Y ¿Donde nos vemos para ir juntós? - Respondió ____ soltando una ligera risa al ver al chico nervioso.
- Perfecto, ¿Que te parece a las 18:00 horas? (6:00) y podríamos vernos en este mismo parque, nos queda cerca a ambos. -Respondió con entusiasmo mientras jugueteaba con la correa de su cachorro entre sus dedos.
- Perfecto, entonces nos vemos aquí a las 18:00 -Respondiste lo más normal posible ocultando la corriente de entusiasmo que invadía tu cuerpo.
Te sentías nerviosa, emocionada y sobre todo feliz, hace mucho tiempo no tenias una cita, pero ¿era una cita? Ahora te sentías algo insegura, inseguridad que fue borrada por el suave empujón de tu peludo amigo, el cual tenía en tu hocico la pelota que habías lanzado antes.
- Son muy unidos ¿verdad? -Respondió Jimin el cual lanzaba un hueso de goma para que su cachorro fuera a buscarlo.
- Sí, es muy importante para mí. -Te arrodillaste tomando la pelota y besar amorosamente la cabeza de tu peludo para después incorporarte y volver a lanzarla.
