Dichosos peces.
Siempre juntos.
Nadando con la corriente,
yo,
el oso que espera paciente en el río,
solo,
lanco mis zarpas al agua fría,
esperando no morirme de inanición.
Pero solo conseguí lastimarme.
Ahora,
sin nada que llevarme a la boca,
decido seguir esperando,
decido seguir fallando,
una y otra vez,
hasta poder conseguir lo que quiero.
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Memorias de un niño roto
Historia CortaMemorias de un niño roto consta de una gran variedad de relatos, cada uno con diferentes significados, la pura realidad, dolor, amor, amistad... Es decir, todo lo que nos rodea. Adéntrate en este mundo, desde el punto de vista de un niño que con el...