Blanca Nieves y los siete... Esperen, ¡Esto no es el cuento infantil!
¿Por qué los enanos miden casi 2 metros? ¿Por qué la princesa es malhablada? ¿Por qué el príncipe no le dobla la edad a la princesa? ¿Y por qué se conocen desde niños? ¿Por qué lo...
Aclaraciones: estoy narrando la historia desde algunos puntos de vista. No todos, porque sería demasiado largo, pero en lo que respecta a la reina, supongamos que fue lo mismo que en la película de Disney.
Este escrito es perteneciente a la dinámica que estuve empleando en mi página, donde la usuaria LoveMoOn90terminó siendo la primera ganadora.
Le agradezco por participar así como la felicito por ganar el primer premio. Prontamente haré otra dinámica para sortear un one-shot de mi autoría 😊❤️ estén pendientes en mi página de Facebook 👀
En otras noticias: espero que hayan pasado una excelente navidad y tengan un feliz año nuevo. Gracias por apoyarme en mis proyectos durante el 2021. Esperemos que en el 2022 traiga más cositas ❤️
Ahora sí, que comience el fanfic.
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Desde que Todoroki Shouto había nacido, siempre supo que su destino era casarse con el príncipe del reino vecino: Bakugou Katsuki. No se conocían realmente pero no era necesario, en la realeza todos los matrimonios resultaban ser arreglados.
La primera vez que lo vio, Todoroki encontró a Bakugou interesante. Era una copia idéntica de su madre, cabellera rubia ceniza y los ojos rojos más intimidantes que había visto. Incluso en su personalidad, Bakugou había salido igual que su progenitora.
Tenían 8 años en su primer encuentro. Ambos estaban incómodos y asustados al verse por primera vez. No ayudaba el hecho de decir que el que tenían enfrente sería "su futuro esposo". Cualquier niño en su posición se hubiese atemorizado.
Quiso intentar al menos una interacción así que le dio la mano para saludarlo. Pero Bakugou le pegó un manotazo y luego se dio la vuelta para ir a esconderse detrás de las piernas de su padre. Él se sobó la mano lastimada pero tampoco insistió.
Cuando cumplieron 12 y nuevamente se volvieron a ver, las cosas no cambiaron mucho. Bakugou continuaba igual, solo que ahora con el cuerpo más de adolescente justo como el de él. Sus interacciones tampoco cambiaron; al menos esta vez pudieron dirigirse la palabra. Insultos más que nada de la boca del rubio, pero fue un comienzo.
La siguiente vez fue a los 16 años. Ya los 2 eran casi unos adultos, Todoroki había crecido y superado en altura a Bakugou, aunque la madurez de ambos seguía siendo tan nula como cuando tenían cuerpos de niños. Esta vez, luego de los 2 intentos que fracasaron en cuanto a entablar una relación con su futuro esposo, Todoroki no insistió.
Por increíble que parezca, cuando le ignoró finalmente logró atraer la atención de Bakugou.
- ¿Qué sucede, principito? ¿Soy demasiado aburrido para ser de tu atención? - Le había dicho aquel rubio cuando le siguió hasta la biblioteca. Lugar donde solía escabullirse de sus deberes.
