Pov: Jungkook y TN son parejas desde hace dos años, una noche, uno de los amigos de Jungkook los invitó a una fiesta de cumpleaños.
...
Narra TN
Nos arreglamos y fuimos a la fiesta, había mucha gente y la música se podía escuchar hasta a un kilómetro, por así decirlo de tan fuerte que estaba. Llegamos, entramos y saludamos, luego nos sentamos en unas sillas de esas altas que hay en las discotecas y comenzamos a hablar del lugar. Mientras tomábamos, hablábamos de cualquier cosa que veíamos o cualquier persona, el alcohol empezó a hacernos efecto y la risa se había hecho presente.
En una, miro a Jk, pero él estaba distraído así que no se dió cuenta de que lo observaba, lo miraba con tantas ganas, como nunca antes, después él notó que lo hacía (lo miraba), sonrío
Jk: ¿qué pasa? – me preguntó confundido.
TN: Estoy empezando a sentirme extraña, pero no por el alcohol sino porque empiezo a tener unas ganas de tí.
Él se rió y luego volvió a mirarme, en broma le pegué un pequeño golpe en el brazo – no es broma, es cierto lo que te digo.
Jk: En todo el tiempo que llevamos de relación me habías dicho éste tipo de cosas.
Yo le agarré una de sus manos y la llevé a mi entrepierna abierta para que él me sintiera, que sintiera lo mojada que estaba por él y lo mucho que lo necesitaba. Él se sorprendió al principio por la acción que había hecho, pero luego sonrió pícaro y empezó a masajear mi clítoris, en cambio yo, cerré los ojos y me dejé llevar por sus malditos movimientos de dedos que me llevaban a todos lados.
En una se me escapó un pequeño gemido, abrí los ojos en cuanto lo hice, miré a todos lados verificando que nadie nos estuviera viendo y tapó mi boca con su otra mano. Luego hizo mis bragas a un lado e introdujo dos de sus dedos en mí. En cuanto introdujo sus dedos en mi feminidad, se me había escapado otro gemido, pero nadie nos escuchaba por la fuerte música que retumbaba en nuestros oídos. Cerré mis ojos, me mordí los labios y con mis manos apreté mis senos mientras gozaba de sus malditos y sensuales movimientos dentro de mí (sí que sabía usar las manos el maldito) (y sí que sabía cómo prenderme o apoderarse de mi cuerpo con pequeños gestos).
Cuando volví a abrir los ojos para mirarlo de arriba abajo, ví como su erección crecía, al parecer su amiguito estaba despertando y me excité aún más, así que lo empecé a acariciar; pasé mis manos por su hermoso rostro (el maldito si que es hermoso y más bajo las luces del lugar), luego seguí a su cuello, su piel es tan suave, seguí bajando a su enorme pecho cubrido por una sensual camisa blanca que le quedaba demasiado sexy, volví a morder mis labios mientras lo recorría hasta que bajé hasta su pantalón negro, donde podía notar su erección crecida.
Sonreí al ver como estaba, llevé mi mirada a la de él, él también me miró a los ojos y nos besamos. Luego se acercó a mi oído y
Jk: Vamos a un lugar más discreto. – (me gustaba donde estábamos, no me importaba hacerlo delante de tanta gente, igual no nos notarían, todos estaban tan ebrios y cada quien estaba en su mundo). Acepté su propuesta con un pequeño movimiento de cabeza, luego él beso mi oído, mejilla y labios, para sonreír, sacar su mano de mi entrepierna, tomarme de la mano y salir juntos de la casa de su amigo.
Salimos afuera, pensé que me llevaría a alguna de las habitaciones de la casa ya que era demasiada grande y tenía muchas, pero no fue así, me llevó hasta el parqueo donde se encontraban los autos de las personas que estaban en la fiesta junto con el de nosotros. Nos detuvimos frente al nuestro (auto), me pegó a éste y comenzó a besarme apasionadamente, me acariciaba como si también me necesitara, sostenía mi cabeza, luego besaba mi cuello, lo lamía y chupaba hasta dejar moretones, pero no me importaba, al final me excitaba más, yo solo me dejaba llevar por su pasión.
Me agarró de la cintura y pegó mi cuerpo al de él para que sintiera su enorme erección, yo gemi al instante en que la sentí, y mordí mi labio inferior, él sonrío y levantó una de mis piernas para llevarla hasta su cintura, empezó a acariciarla, arrastró mi vestido hasta subirlo y apretó mis nalgas. Me cargó completamente para quedar alrededor de su cintura, desabotono su pantalón, sacó su miembro, hizo a un lado mi braga y lo introdujo en mí. Gemí al sentirlo dentro, fue repentino, un poco doloroso, pero delicioso, se quedó quieto en cuanto entró para que me acostumbrara, después empezó a moverse despacio y suave.
Empecé a disfrutarlo mientras nos besábamos, me agarró de las piernas y comenzó a moverse más rápido, yo empecé a gemir más y a gozar más de lo que tenía dentro. Me sostenía de su cuello, tenía mis manos alrededor de éste mientras lo besaba como loca de amor y llena de ganas, su lengua recorría mi boca y la mía la de él, mis dientes mordían su labio inferior y eso hacia que se excitara más, me decía cosas que me encantaban
Jk: Me encanta cuando te pones así de sexy, como me provocas, como me tocas, como me besas así de sucio y como me excitas, me encantas, TN. – me gustaba cuando decía ese tipo de cosas, me gustaba él. – Dí, dí qué soy el único hombre que te trae loca, dí que soy el único que te hace sentir mujer, dí que soy el único que te que excita y te hace gemir hasta no poder. Dilo, TN.
Yo repetía sus palabras como me decía, le gustaba que le obedeciera y a mí me gustaba cuando se hacía el chico malo y pervertido que tanto amo.
Después de unos minutos besándonos y moviendonos, llegamos al orgasmo al mismo tiempo. Se sintió excelente, magnífico, como nunca antes, eso es lo que me gustaba de la relación que todo era en un lugar nuevo, en una diferente posición con diferentes palabras y eso hacia que me gustara más como a él.
Cuando terminamos, me bajó con cuidado, abrió la puerta del auto, saco unas toallitas húmedas que siempre lleva con él, cogió una para él y me pasó una, diciendo que me limpiara para luego volver a la fiesta. Después de hacerlo, me dió un corto y cálido beso, agarró de la mano y volvimos a la fiesta como si nada pasara.
