Efecto mariposa.

Parte 5

La vida de Naoto había sido normal, una infancia normal, adolescencia y adultez normales, nada que envidiar ni que odiar, pero el sentimiento surgió en sus últimos años en la primaria.

No sabia como expresarlo, un día de camino a casa paso por un parque frente al edificio donde vivía, estaba cansado y enojado porque su padre no volvería ese fin de semana tampoco, se sentó en los columpios pensando en todo y nada.

Y ahí surgió el sentimiento, su cabeza arrojo un nombre al azar, Takemichi, al principio no lo entendió, pensó que tal vez había escuchado ese nombre en otro lugar, en la escuela o de camino a casa, sin pensarlo mucho fue a su casa, olvidando el nombre.

Después su hermana mayor llego a casa con un collar, al simple y normal, pero volvió a surgir el nombre, después de eso, tuvo un extraño sueño, un chico de horrible color de pelo, le decía en el mismo parque frente a casa, que el y su hermana morirían.

No era un sueño normal, lo sentía tan vívidamente que casi parecía mas un recuerdo que un sueño, decidió que iría a ese parque todos los días, para ver si se podía encontrar con esa persona.

Pero nunca paso, y poco a poco se fue llenando de mas sueños extraños, algunos eran dándole la mano al chico y otros eran de un chico de cabello negro que le contaba cosas que no podía escuchar muy bien.

Hasta el sueño mas revelador, era un sueño donde su hermana le decía lo preocupada que estaba por su novio Take, algo de el uniéndose a un pandilla y ser golpeado casi siempre, ese mismo día cuando despertó le pregunto a su hermana, pero ella negaba conocer a un Takemichi.

No puede negar que tal vez se obsesiono un poco con eso, llego a ir a escondidas a la escuela de su hermana y preguntar a cuanto se topara por un chico de cabello amarillo, pero nadie parecía conocerlo, después pregunto por posibles pandilleros en la escuela.

Eso solo lo llevo a tres chicos que se vestían exactamente igual que Takemichi pero que no lo conocían, solo un chico que se hacia llamar Akkun le llego a decir que también sentía que había perdido a alguien importante.

Pero el chico no estaba realmente interesado en buscar respuestas, así que no sirvió para nada, su obsesión llego algo lejos y escribió en múltiples diarios todos sus sueños, iba a esos lugares varias veces a la semana pero jamas lo encontró.

Poco a poco se fue deteriorando su convicción, se centro mas en la escuela y los sueños se detuvieron poco a poco, y cuando llego a la adultez, algo le decía que tenia que ser un detective, jamas le llamo mucho la atención ya que era el trabajo de su padre.

Pero era una fuerza mayor, una vez que entro a la policía, busco en registro y en los casos que tenia a Takemichi, pero era como si simplemente hubiera sido algo que su mente creo, un fantasma o un amigo imaginario.

Guardo sus diarios y dejo de investigar, se convenció lentamente de que Takemichi no existía, o que tal vez era alguien de otro lado.

-

Jamas se preparo para el día en que mas personas quisieran buscar a esa persona.

-Dices que esa chica Emma conocía a Takemichi?- su hermana se veía algo asustada, ella había sido la primera en decirle hace muchos años que mejor se olvidara de su búsqueda.

-Si, al parecer su hermano encontró cosas que prueban que Takemichi existe o existió- Hinata no era una gran candidata a buscar cosas sin sentido, creer que hubo una persona que simplemente olvido, era absurdo.

Naoto contemplo la respuesta ¿pruebas?, algo tangible que les decía que si existía, no solo recuerdos fugaces y olvidadizos.

-¿Ella dejo algo?- No es que confiara de todo en esa chica, pero que probabilidad hay de que una persona completamente desconocida para el, buscara exactamente a la misma persona que el.

-Dejo su numero y dirección, dijo que si querías volver a buscar a este Takemichi la contactaras, pero...Naoto y si esta mintiendo, ¿realmente crees que tiene pruebas de una persona que ni siquiera esta registrada en el país?-

Hinata tenia un punto, pero Naoto volvía a sentir esa sensación de vacío y desespero, como si tuviera algo que hacer y solo se prolonga su realización y eso lo pone ansioso.

-Tengo que arriesgarme Hinata, se que nunca creíste en la existencia de Takemichi, pero...no puedo simplemente olvidarlo-

Después de eso nadie hablo, el se fue a su casa, con el numero y dirección en la mano, contemplo los pros y contras de esto, no conocía a esas personas, y podían ser malas personas, pero el ya no era un niño y era prácticamente la policía.

Esa noche durmió con mil preguntas que podían o no ser respondidas por esas personas, no hablaría de prácticamente haber hecho un control de antecedentes de Emma Sano, pero estaba limpia .

-

Al día siguiente mas decidido que nunca marco el numero, se le hacia mejor que presentarse en una casa desconocida.

-Hola?- la voz era de un hombre

-Hola, llamo porque una mujer llamada Emma Sano le dejo este numero a mi hermana Hinata-

-¿Eres el chico que busco a Takemicchi? soy Sano Manjiro el hermano de Emma-

-Si soy yo, ella comento que usted tenia pruebas de que el existió-

-Así es, yo...encontré ropa y un numero de teléfono-

-Le parece bien encontrarnos?-

-Si, bueno Emma dijo que dejo nuestra dirección, ¿puedes venir hoy?-

-Claro iré hoy en la tarde- ambos se despidieron con un nudo en la garganta del nerviosismo.

Naoto sabia que era el momento de sacar todo los diarios que había escrito, si era cierto, tal vez era el momento de encontrarse de nuevo con Takemichi y saber por que siente que lo conoce.

-

(Gracias, por leer, espero que este cap les guste)