CAPITULO SEGUNDO

48 3 0
                                    

Llegó la hora y yo me había quedado dormida en la cama escuchando edd sheenegar cuando de repente me despertó el ruido del timbre sonando como un descosido, baje corriendo, miré por el pestillo y abrí a Nicole

- Nena venga vamos llegaremos como siempre tarde - dijo emocionada y no podía creer que se tratara de una de sus bromas-

- vale vámonos- cojo mi bolso con el móvil y una cartera además de muchas otras cosas ridículas que llevaba siempre conmigo-

Llegamos a la playa riendo y charlando cuando me quise dar cuenta allí estaba el haciendo el tonto con sus amigos y las novias de sus amigos.

- Hola josh- boceó Nicole con una amplia sonrisa, acto seguido nos presento a todo y cada uno de sus amigos-

- Hola Nicole- le dió dos besos en las mejillas a Nicole y otros dos a mí- soy Josh ¿ tu eres?- sonreía con sus dientes perfectos-

- Yo mm... Emmm... Kat-dije muy dubitativa pero a la vez, el pecho se me salía del corazón-

Josh me miró sonriente durante casi toda la presentación, cenamos sentados sus dos amigos el y nosotras dos cuando ví que Nicole ya estaba bebida y tonteaba con el amigo de Josh, me levanté y me dirijí detrás de unas rocas enormes, estuve por lo menos allí sola escuchando el ruido del mar durante dos horas por lo menos, al instante escuché pisadas de alguien dirigirse a mí, pero no dí mucha importancia ya que creía que era Nicole y su borrachera como habitualmente era.

- Nicole no quiero beber- dije ya que siempre venía a preguntarme que si quería beber-

-¿ que te hace pensar que soy Nicole?- dijo una voz masculina y sensual sentándose a mi lado, me voltee-

- creía que eras ella - rió leve- ¿ que haces aquí ?
- estar contigo,¿ puedo?- dijo muy seductor y a la vez en plan de broma -

- si lo que quieres es aburrirte bienvenido seas- río mirandole - me encanta el sonido del mar romper contra las rocas.

-esta bien si me tengo que aburrir para que este contigo lo haré- sonreí mientras saca un cigarro delante de mi-

No digo nada para no joder la situación que había, aunque detestaba el humo de cualquier cosa que lo soltara.

- oye puedes apagar eso?- le dije vergonzosamente intentando ser amable-

- ¿te molesta?

- la verdad es que sí- miro la hora y recojo mis cosas- tengo que irme es tarde adiós- me voy a paso ligero a mi casa pensando que a lo mejor el chico " perfecto " no era tan perfecto.

en busca del amor prohibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora