Paul Hart (profesor y efecto)

Más cerca

Desperté con los pocos rayos del sol que se filtraban a través de los huecos de las persianas, el fresco tacto de las sábanas blancas y el recuerdo intacto de Sabrina.

Me quedé un par de minutos tumbado en la cama, miré el reloj, eran poco más de las 9:00, me incorporé y bajé a la cocina. Apenas con ganas comí algo ligero y salí a tomar un poco de sol. Subí a mi habitación y me puse un conjunto deportivo, salí corriendo hasta el gimnasio y ahí estuve un par de horas. Al regresar a casa aunque estaba un poco sudado tomé dos cubetas con agua y salí a lavar mi auto, prefería lavarlo yo mismo. Después de una hora de tallar y enjuagar mi ropa quedo empapada. Entre casa, subí hacía mi habitación y me desnudé para tomar un baño, llené la bañera con agua y mientras llevé la ropa sucia al cuarto de lavado y de regreso tomé un libro de shakespeare que había dejado olvidado en la sala. Cerré la llave y puse un jabón espumoso con olor a rosas, me metí evitando que el agua tocara mis manos, acerque el libro y comencé a leer. Después de unos 20 minutos cerré el libro y lo dejé a un lado. Cerré mis ojos y me quedé así otro rato dentro de la bañera.
Me levanté y tomé mi toalla, me la enredé a la cintura y caminé a mi habitación. Tomé una playera con cuello en "v" y un pantalón deportivo gris, bajé descalzo a la sala y encendí el televisor. Tomé mi celular para hablar con mi hermana, pero vi el contacto de Sabrina y le escribí un texto.
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Sabrina :)

¿qué tal amaneció hoy? ¿puedo llamarla?
La llamé sin antes recibir una respuesta.

Contestó.

Hola! -hable primero-

Hola Paul, ¿qué tal estás? -respondió son una sensual voz-

Le seguía la corriente.

Bien, un poco cansado, he ido al gimnasio y al regresar he lavado el auto, pude llevarlo, pero preferí hacerlo yo -respondi-  ¿Qué tal tú?

Escuché una pequeña risa antes de que ella respondiera.  -Bien, hice unas compras en el supermercado, pero no puede sacar a pasear a mi perro a pasear, ahora está ansioso por salir.

Debe ser una buena compañía, yo nunca he tenido una mascota -le conté-

Si, de hecho... lo es. -dijo con voz profunda- y qué estabas haciendo antes? -cambio el tema-

Bueno, buscaba un par de películas para ver, antes de eso me di un baño, por cierto, ¿alguna sugerencia?

No recibí respuesta.

¿Estás ahí? -pregunté-

Si, lo siento. -siguió- Estaba pensando en algo, pero claro, me gusta mucho una película que se llama "Medianoche en Paris". Es perfecta para nosotros, sé que te gustaría.

Oh! Perfecto, la veré. -contesté-

¡Ey, ven acá! -escuché por el teléfono- Lo siento, mi perro. Quiere salir.

Que ganas de conocerlo, debe ser lindo. -reí-

Le agradan más las personas que le regalan rollitos de canela -escuché su risa-

Claro! -repliqué- Como a ti.

¿Paul? -dijo apurada y pensativa-

Dime -respondí enseguida-

La pase muy bien anoche -me dijo con voz tímida pero clara, aunque casi susurrando-

Me dió un pequeño escalofrío pero mi cuerpo se calento.

Yo... también lo pase muy bien -respondí con cierta seriedad en mi voz-

¿Quieres acompañarme a pasear a Bruce por la noche...? -dijo de repente-

Claro! -Contesté emocionado-

Hay un parque cerca de mi casa y me gusta cuando oscurece... Podemos ir ahí -me dijo-

Me parece bien, ¿a qué hora quieres que te vea? -pregunté-

¿7:30 pm te parece bien? -respondió-

Si, estaré ahí. Sabrina. Nos vemos.

Colgó.

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Ya regresé ahora si amixs
Pasado mañana nuevo capítulo:)