¿Qué es el color?-(En proceso)

Hilarem

❥ Gaby

-Oh, Celia- Exclamé enternecida al ver como mi hermana salía por las puertas del reino cubriéndose con su bata de dormir afelpada.-No tenías que levantarte- Aseguré al ver su moño desarreglado y su cara que evidenciaba que apenas no hacía mucho que había abierto sus ojos.

-Calla, calla- Respondió bajando a toda velocidad las escaleras. 

Al llegar frente a nosotros sonrió.

-¿Llevan todo?- Cuestionó dándole una mirada rápida a los dos cabellos que nos iban a servir de transporte. Cada uno en sus costados, colgaban las bolsas de nuestras pertenencias.

-Toda la casa-Aseguré mintiendo.

Era claro que no llevábamos tanto. Si acaso, lo que abundaba era la ropa extravagante que llevaríamos Patrick y yo. ¿Comida y agua?, solo la suficiente para el camino. Al final de cuentas papá nos había dado bastante dinero. Ya en el pueblo podríamos abastecer la despensa. 

-¿Y están seguro que la comida que llevan les ajustará para el mes?, porque si no, ahora mismo voy a la cocina y les cocino algo...

-Estamos bien, Celia-La interrumpí.

Sí dejaba que sus preocupaciones se extendieran junto con sus ganas de supervisar todo. Nunca saldríamos de aquí.

Celia asintió comprendiendo lo que se avecinaba.

La despedida.

-Entonces...¿Ya se van?-Preguntó con unos ojos de cachorro.

Miré a Patrick que estaba al lado de su caballo, y con sincronía asentimos con una gran sonrisa en el rostro.

Celia suspiró tomándome del rostro.

-¿Por qué no me contaste esta idea?, quizás hubiera podido ir con ustedes y...

-¿Y dejar a Chris con nuestros padres y hermana? No te ofendas, pero eso solo terminaría con Chris vuelto loco, y de seguro con tu divorcio- Las dos reímos, pero el rostro de Celia volvió a tergiversar por la preocupación. 

Suspirando, tomé sus manos para bajarlas de mi rostro y poder apretarlas en las mías.

-Hermana, tu misma lo has dicho. Si te hubiera platicado la idea, muy probablemente hubieras querido ir, y no es que no ame tu compañía, pero... ¿No crees que ya es hora que comience a vivir? No debes de preocuparte por mí, tu misma me has enseñado cómo cuidarme sola. Estoy lista para salir del nido.-

Celia apretó sus labios aguantando las lágrimas.

-Lo sé, lo sé, Gaby. Sé que eres una mujer preparada para salir al exterior. Pero, comprende que yo te crie, te cuidé y te protegí. Mi instinto no puede evitar no sentir la necesidad de seguir haciéndolo. Pero está bien, sé que es lo que quieres hacer, y sé que no será para siempre.-Depositó un beso en mi frente- Te veo en un mes, hermana.-Me sonrió soltándome para dejarme ir. 

-Nos vemos en un mes, querida. Y prepárate, porque puede que llegue más loca de lo que ya estoy- Puntualicé mientras subía al caballo. 

Ella rio.

-No lo dudo ni tantito- 

La mirada de Celia se giró hacia Patrick, que también ya estaba montado en el caballo.

-Patrick, sabes que te aprecio mucho. Así que por favor cuídate y cuídala como siempre lo has hecho.-

-Lo haré, su majestad- Garantizó este.

-Bueno, ¡Váyanse ya!-Mi hermana espetó- Que no quiero que lleguen tarde a su primera parada.

Patrick y yo asentimos, y con un movimiento al potro, nos empezamos a mover de forma regular. Ya a unos cuantos metros alejados del castillo, giré mi vista para aún ver a Celia ahí viéndonos marchar. Con un despido de mano y un "hasta pronto", aceleramos perdiéndonos entre las calles de Senium, hasta que pasamos la entrada del pueblo que era levantada por los guardias.