-Easy on me-

2.

📍Florencia, Italia.

Tres días después de aquello, las cosas iban aún más "raras" y con eso me refiero a que han habido muchos momentos más íntimos entre ambos pero ya no como amigos.

Es extraño, pero me gusta.

Hoy era el cumpleaños del Essy así que ambos viajaríamos a Bologna para celebrarlo con nuestros amigos de allá. Cuando llegamos todos al parecer sabían que pasaría, porque a penas cruzamos la puerta comenzaron a molestarnos.

—Feliz cumpleaños mi vida—Extendí mi obsequio y luego mis brazos para abrazarle.

—Mi vida, ya te extrañaba—Besó mi mejilla.

—Hasta ahí—El Erick lo miró serio y alzó sus cejas—Feliz cumpleaños guatón—Lo abrazó fuerte.

—¿Y ustedes que?—Nos sonrió la Aky—¿ya son?.

—¿Ya somos que?.

—Aún no—Se adelantó el Erick muy seguro—pronto.

Me guiñó el ojo y se fue con sus amigos mientras yo me quedé con la Aky.

—¿Y ya lo decidiste?.

—¿Decidir que?.

—Si el Erick te pide que seas su novia tendrás que decidir si quedarte aquí o no—Me miró nerviosa—y eso pasará si o si.

—No me ha dicho nada por el momento, pero es que no se—Ahogué mis dudas en una cerveza—yo tengo todo allá y me ha costado mucho poder lograr todo.

—Pero si te pide pololeo no creo que sea a distancia, te contaré algo pero tú me guardarás el secreto, ¿bueno?—Asenti—el Erick está muy ilusionado con esto, y más con la idea de que tú te quedes aquí con el. Ya me ha preguntado sobre lugares para formar un salón para ti.

—¿Me lo juras?.

—Claro que si, pero tú sabes—Paso sus dedos por los labios en un gesto de guardar silencio—no he dicho nada.

—Tu secreto está a salvo conmigo.

La fiesta era más una reunión entre amigos al no tratarse de un fin de semana, pero de todas maneras quisimos ir a compartir con él aunque pronto debimos volver a casa.

—Mañana solo tengo entrenamiento por la mañana, ¿te gustaría salir en la tarde?.

—Obvio que si, me trajiste solo para tenerme encerrada—Nos reímos—además me iré en tres días más.

—¿No quieres quedarte más tiempo?.

—No puedo, ya lo hablamos—Rodó los ojos—me carga que hagas eso y lo sabes.

—Si sé, pero es que una semana es muy poquito.

—Es tiempo suficiente además volveré para Navidad y Año Nuevo.

Tal como lo cumplió, al otro día luego de llegar del entrenamiento nos fuimos al centro a pasear un poco. Ya comenzaba a estar más baja la temperatura, casi recordando que llegaría el invierno en unos meses más.

Acabamos en una pequeña playa, estaba vacía así que nos acomodamos por ahí a mirar el mar. Él estaba nervioso, sabía lo que se vendría y era extraño porque cuando pensaba en que podía llegar este momento pensaba que estaría ansiosa pero feliz, en cambio ahora no sabía que pensar.

—Bueno, necesito hablar contigo ya más en serio—Se acomodó y tragó saliva notablemente nervioso. Algo no típico en él—yo sé que nos conocemos hace años y todo lo que ha pasado, pero yo creo que es evidente y bueno...no quiero seguir dándole vueltas. Simplemente me gustas y mucho.