Los celos de Lan Wangji y sus consecuencias

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Capítulo Único

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Lan Zhan bebe vinagre y se comporta muy grosero, nunca mas volvera a hacerlo.

Wei Wuxian ya hacía un año y poco más que vivía con Lan Wangji en el Descanso de las Nubes. No era muy bien visto por los mayores de la secta, apenas era tolerado. Pero, al menos, tenía la buena predisposición de Lan XiChen, que se lo demostraba cuando salía de sus periodos de meditación.

Entre sus limitaciones, tenía prohibido hablar con los adolescentes aprendices, aunque una simple regla no podría detenerlo, rompió muchísimas antes.

A menudo se encontraba con los jóvenes en las cacerías nocturnas que organizaban, ¿Cómo podría negarse a esas miradas anhelantes e invitaciones respetuosas? No ir era desperdiciar una posible experiencia de aprendizaje para los jóvenes discípulos de la Secta Lan y otras sectas invitadas. Durante las cacerías, Wen Ning era un miembro infaltable, siendo una gran línea de defensa para todos y una excelente compañía silenciosa. Estos eran sus mejores momentos de esparcimiento, obviando los que pasa con su amado Lan Er-gege.

Sucedió en una de esas tantas veces que se había ido con los juniors. Todos los discípulos regresaron al horario habitual, antes del toque de queda, sin embargo, Wei Wuxian no lo hizo.

Lan Wangji lo esperó un par de horas, preparando meticulosamente el baño y manteniéndolo caliente con algunos talismanes. También se encargó de cocinar una cena bien condimentada, pero aún no llegaba.

La luna se encontraba en su punto más alto y el aire frío había caído en la montaña, el Receso de las Nubes estaba esperando una fuerte nevada. Totalmente fuera de su propio carácter e inquieto, se dirigió al área de los discípulos, específicamente donde se encontraba Lan Sizhui a punto de conciliar el sueño, la respuesta simple y llana fue que Wei Wuxian se quedó charlando con Wen Ning.

Lan Wangji no dijo más de lo necesario en su habitual rostro inescrutable, pero en su interior, la cuestión era otra. Sentía bullir los celos y el resquemor a Wen Ning. Sabía y había observado que el general fantasma adoraba a Wei Ying y era capaz de cualquier cosa por él, pero ¿qué clase de adoración le tenía en realidad?

No desconfiaba de Wei Ying al respecto, pero no le gustaba que se quedará a solas tanto tiempo con el otro. Incluso pasaron las 9 de la noche y no regresaba, todos ya estaban durmiendo, pero a Lan Wangji le sería imposible conciliar el sueño sin verlo.

Conforme el tiempo pasaba, la inquietud del jade aumentaba. ¿Y si algo le ocurrió en el camino? A fin de cuentas, el solo tenía su flauta, con la que aun dominaba espíritus con energía resentida, y sus talismanes en conjunto con todas sus demás habilidades. Pero, aun así, no era tan fuerte como cuando tenía su núcleo dorado o el amuleto del Tigre Estigio. Y si nada le había pasado y solo estaba con Wen Ning, ¿con qué necesidad se quedaban solos tanto tiempo?

Si; la inquietud aumentaba, mucha preocupación y tal vez debería ya salir a buscarlo.

Pasadas las 10 horas Wei Ying apareció como si nada. Con su ropa negra bastante cubierto de tierra. Helado, y hablador, contando sus aventuras y toda su diversión. Se veía adorable, y no prestaba atención a la actitud indiferente de Lan Wangji, que sentado en el escritorio corregía exámenes en silencio.

Nunca podría imaginar, que a pesar de estar como si nada, Lan Wangji sentía que le volvía el alma al cuerpo en ese mismo instante. Confiaba absolutamente en las habilidades de supervivencia de su amado esposo, pero solo hasta que se demoraba más de lo necesario. Entonces la duda y el temor de volver a perderlo, se sentía como una cuchilla afilada sesgando dentro de su pecho. Esa sensación sumada a los celos, enojaba a Lan Wangji contra su desconsiderado esposo, al que parecía no importarle la preocupación que le generaba.

Los Celos de Lan ZhanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora