UN DESTINO EN LLAMAS CHICAGO FIRE

NUESTRO SECRETO

°|advertencia +18 |°

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el me cargó como si pesara como una pluma enrede mis piernas en su cintura y el subio las escaleras le dije cual era mi habitación y me acostó en la cama con mucho cuidado, nos miramos fijamente y el se atrevió a hablar primero

- ¿Segura estas lista?

Si - dije entre besos -

- Bien.

Él se separó y me miro fijamente, paso sus manos por mi cintura y levanto un poco mi blusa para luego quitármela, me miro por un par de segundos.

- Acuéstate.

Hice lo que me dijo, se subió un poco a la cama, bajo mis jeans y sentí cierto escalofrío recorrer mi cuerpo, mi mirada estaba puesto en el techo y sentía y mi respiración estaba agitada.

Volvió a subir a la cama, no se puso sobre mi sino a mi lado, lo mire y él se acercó a besarme nuevamente, subí mi mano por su torso hasta llegar a su primer botón, comencé a quitar botón por botón mientras que la camisa se iba abriendo, cuando por fin lo hice él se retiró la camisa, vi su torso desnudo y me encantaba, sus lunares, sus pocos vellos en asomaban .
Pase mi dedo índice por todo su torso.

Poco a poco fuimos quedando desnudos, o más bien él poco a poco fue quedando sin ropa. Retiro mi sostén con mucho cuidado, sentía cierta vergüenza de que me viera sin mi sostén, se que me ha visto en brasieres deportivos pero no sin ellos. Retiro mí sostén con mucho cuidado, sentía cierta vergüenza de que me viera sin mi sostén, Bajo mis pantis y mis nervios incrementaron aún más. Luego de unos segundos ambos estábamos completamente desnudos, comenzó a dejar besos en mis labios, bajo a mi barbilla, mi mentón, mi cuello, por mi pecho, por en medio de mis senos para luego sentir sus labios sobre uno de ellos lo cual hizo que me estremeciera, beso mi otro seno colocando sus labios sobre mi pezón, bajo por mi abdomen, sentí sus besos en mi pelvis, bajaron un poco más y moví mis caderas un poco, él me tomó de ellas para inmovilizarme, bajo sus besos por mis muslos y después fue dejando besos en cada una de mis piernas. Tomó una de mis manos y dejó un beso, tomó la otra y también dejó otro beso.

Sentí como movía mis piernas y se colocaba en medio de ellas, sobre su billetera había un condón el cual tomó, lo abrió y se lo colocó, no me había atrevido a bajar mi vista para ver su miembro, aún no me sentía lista para verlo.

- Si te duele y quieres que me detenga solo dímelo - él susurro en mis labios - y lo haré ¿de acuerdo?

- Sí...

- Bien- volvió a besarme - lo haré ahora.

Tome un respiro y cerré mis ojos, él bajo su mano y tomó su miembro luego sentí sus dedos en mi vagina, solté un ligero jadeo al sentir sus caricias, sentí como introducía uno de sus dedos lo cual me hizo jadear aún más.

- ¿Te duele? - susurro -

- No - respondí -

Él siguió bombeando, introdujo otro de sus dedos y volví a jadear sobre sus labios, me gustaba y mucho. Sentí el líquido correr por mis muslos, él retiro sus dedos y después sentí la punta de su miembro en mi entrada. Dio un ligero empujón pero maldijo al no lograr su objetivo, guió de nuevo su miembro y esta vez se aseguró de que entrara, sentí solo la punta entrar y sentí un ligero dolor lo cual me hizo presionar su brazo un poco. Siguió introduciendo, me volví a quejar ya que esta vez me había dolido un poco más fuerte.