Tiempos De Verano (Rengoku Kyojuro Y Tú)

Capítulo 3

—Concéntrate en esta parte, analiza las ideas, observa lo como si fuera un problema de la casa, ¿Qué sucede? ¿Qué reacciones hay? ¿Qué soluciones se dan? ¿Cuáles son las personas involucradas? Dime tus dudas y después comienza a resolverlo; ¿De acuerdo?

—S-sí Rengoku-sensei...

Comencé a seguir las indicaciones de Rengoku, leía todo detenidamente y comenzaba a coincidir el resumen con las actividades.

—¡¡Mmm!! (Esto cada vez es más confuso) — mientras me centraba en mi libreta, la sensación de una mirada fija en mí me atormentaba un poco.

—Veo que se te complica cada vez que avanzas más.

—S-sí...un poco...solo es cosa de darle unas cuantas hojeadas. Para volver a resolver las actividades.

—Es muy interesante tu forma de hacerlo pero—se coloca en cunclillas— te voy a decir un secreto, existen unas  técnicas que mi padre me enseñó desde hace tiempo para ayudarme en estos casos —Fijó su mirada en mi libreta—pero solo te enseñaré una, las demás tendrás que aprenderlas y desarrollarlas a lo largo del curso. Esta técnica se llama "respiración de concentración absoluta", consiste en centrar toda tu respiración y controlar todos tus pensamientos y atención en un solo objetivo, en este caso tu actividad. Así que olvida todo lo demás, respira profundamente, exhala lentamente, desvanece todo lo demás, enfoca todo en tí y en tu trabajo.

Inhalé profundamente como él me había dicho, cerré mis ojos, desvanecí todo el ruido a mi alrededor, solo estaba en mi trabajo...pude ver cómo todo fluía, ¡Todo era más fácil!

—Rengoku-sensei es increíble!—dije con emoción sin quitar la mirada de mi libreta.

—¡Así se hace!, ¡Ahora continúa con la segunda actividad!

—¡Sí!...¡¡¿Pero que?!! (No puede ser cierto esto está mucho más complicado!!) Rengoku-sen...

—¡Shh! Concéntrate y recuerda, solo eres tú y tu actividad.

—Sí señor...
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—¡Se acabo el tiempó! Pasen a la revisión de sus actividades.

En cuanto el profesor habló, una fila larga comenzó a llenarse. Yo estuve entre las últimas alumnas en revisar.

—¡¡EHH!! ¡¡NO EMPUJEN!!

— (Ay no...reconozco esa voz!) —Levanté mi mirada encontrándome con el rey puerco.

—¡¡DEJEN DE EMPUJAR O LES ENSEÑARÉ A RESPETARME!!

—Deberías cerrar tu boca.

—¿Otra vez tú? ¿Acaso no puedes estar lejos de mi genialidad?

—Solamente te haces ideas.

—¡¡¿Eh?!! Ideas es lo que a ti te falta.

—¡¡Oye!!

—¡Tsk! ¿¡Quieren bajar la voz!?—dijo un chico detrás mío—son un fastidio...no entiendo cómo el profesor puede aguantarlos a los dos.

—Digamos que tu actitud no es de las que son amigables.

—¿Que insinuas niña?

—Lo que quieras pensar...

—Eres...

—¡¡Eh!! ¡¡No molestes a mi subordinada!!

—¡¡¿Disculpa?!!

—¡¡Siguiente!!—la voz de Rengoku nos hizo volver a la fila—Muy bien Inosuke, pero intenta mejorar tu resumen, para que no te sea difícil después de un examen.