Protagonista: Harbinger.
Shippeo: Harbinger x Kiki.
Esto fue esta inspirado en un Roll-Play que hice con mi amiga akuma, solo que nosotros lo hicimos con Seiya, pero pense que tenia más sentido poner a Kiki.
- ¿Kiki...? ¿Sera que...?
- No. - El santo de Aries solo rio ante el fuerte quejido que soltó el patriarca del santuario, ante su negación a "Abrirle las piernas" - Tienes que ser un poco más cariñoso, ¿Sabes? Te amo y todo pero deberías tener más tacto. - Bromeo, sacándole la lengua cual niño otra vez, puede que para Harbinger sea molesto solo porque estada en la recamara que como patriarca le correspondía, pero igual era divertido molestarlo de a ratos.
- ¿Te gusta burlarte de mí, verdad? - Molesto expreso, volteando los ojos a la par que buscada acomodarse en la cama. Quedando boca abajo cerca de él, ambos en ropas cortas y que en palabras del antiguo toro eran mucho más cómodas. - Siempre juegas así conmigo...
- No te lo tomes a mal. Mi viva. Jaja.
- ¿Vez? Lo haces otra vez. - Kiki sonrió, pasando su mano y acariciando el rostro del patriarca. Pensando lo obvio y es que al toro vaya que le faltada estar más tiempo con la gente, en un ambiente más ameno y no tan agresivo.
- Sabes que no lo hago de forma personal. Solo busco que te relajes.
- No lo logras mucho, a veces no sé ni que quieres.
- ¿Te molesto entonces? ¿Has tenido amigos?
- Claro que los he tenido, bueno... Se podría decir... - Las cejas del toro se torcieron al pronunciar eso, quedando pensando mucho. - En fin. Sobre lo primero, claro que no me molesta, después de todo me obligaron a tomar este cargo que ni quería, lo menos que puedo tener es a mi pequeña doncella a mi lado.- Expreso, haciendo reír al Aries no ofendido si no enternecido. - ¿Dije algo malo?
- No. - Le sonrió, haciéndole una sea para que se levante, ofreciéndole un beso al tenerlo frente a frente, hecho que el toro no desaprovecho, teniendo Kiki que ponerle un límite porque conociéndolo, iba a terminar en sexo y quería ponerle un límite a su relación, sabía que Harbinger no ha tenido alguna relación seria con nadie antes de él, pero sentía que se estaban desviando un poco y de lo que Mu y Shiryu le llegaron a enseñar de relaciones no quería que solo fueran compañeros de cama.
- Por cierto, ¿Enserio odias esto?
- Pues siendo honesto, no, sé que bien que todos estos mocosos les urgía mi liderazgo y mano dura, no sé qué piensa Athena, pero de verdad descuido a un millón sus guerreros. - Kiki no dijo nada, solo movió la cabeza de un lado otro como pensando en que decirle. - Son solo mocosos que ni saben hacerse las pajas, como para meterlos a pelear.
- Jajajajaja. Si supieras a qué edad Seiya empezó a pelear como santo, creo que pensarías otra cosa. Yo empecé mis entrenamientos desde temprano igual.
- Que negligente tu diosa entonces, y mira que lo digo yo. - Ironizo, pasando sus manos de un momento a otro por la cintura del santo de Aries, sonriendo coqueto hasta el momento que agarro su cintura para abrazarlo, haciéndole una jugada que Kiki en su vida pensó que le harían: Cosquillas.
- Jajajajajajajajajajajajajajjajajajajajajaja. Para, para. - Pidió, retorciéndose uno contra el otro en esa cama, por un largo rato entre risas y empujones ya que patriarca no quería soltar tan fácil al santo de su primer templo. - Harb, no me obligues a apartarte. - Sentencio, a duras penas pues apenas podía hablar. Suspirando con pesadez cuando por fin pudo respirar en paz. - Malo... - Juguetón musito, golpeando ligeramente el hombro del peli-morado.
Harbinger sonrió de buena gana, acercando al Aries y abrazando de forma protectora ambos sentados en la cama donde estaban.
- Ahora que lo recuerdo... Hace poco mencionaste algo ¿De donde sacaste a Raki?
- Es mi hija, la tuve con Shiryu.
- ¡¿QUE?! - Tras la fuerte risa que invadió a Kiki, Harbinger supo que el grito escandalizado que pego fue producto de un engaño de parte del borrego. - Borrego mañoso. Ya dime la verdad.
- Pues Raki solo es una niña que puedo decir que adopte. No sé como explicártelo, pero lo normal es que un Muviano sea instruido en el santuario.
- ¿Tienen su propio clan o una mierda de esas?
- Digamos que sí. Yo quede a mano de mi maestro y antiguo Aries, Raki a mi cargo.
- Yaaa... Uhmm... - Ahora no sabía ni que decir ahora. - Por un momento pensé en preñarte. - Bromeo.
- Jajajaja. Si eso fuera posible a estas alturas ya estaría a punto de bar a la luz, en casi los 2 años has demostrado muchas cualidades.
- ¿Eso es un alago? - Kiko asintió. - Oye... ¿Raki te ve como su madre o algo?
- De hecho me ha preguntado sobre eso también, te ve como casi un hermano. O bueno, en sus palabras "Un hermano oso cariñoso oculto en hierro"
- ¿Qué? Esa niña... - Ahora no sabía ni que decir, pero si se sentía casi ofendido. - Tendré que hablar con ella.
- De eso mejor mañana, yo ya me iré a dormir.
- Ok.
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Tauro Gold Saint Zone (Libro #2)
FanfictionSegundo libro de la campaña #TauroNeedLove creada por mi.