Capítulo 21: Estrellas en un frasco

234 28 19
                                    

Enero 9, 1977

Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería

Torre de astronomía

7:30 p.m.

—¿Lista?—preguntó Severus mirando a Stella con calma.

—Lista—dijo Stella en respuesta alzando su varita lista.

El tres de enero todos los estudiantes habían vuelto a Hogwarts y, con eso, empezaron las clases nuevamente. A partir de ese día, Severus había vuelvo a atender su negocio de las tutorías. 

No obstante, esa en sí no era una tutoría. Era la continuación de su trato con Stella Black. Él se había decidido a enseñarle primero lo que era la oclumancia, la cual encontró en Stella bastante dedicación a la hora de aprenderla. 

Si bien se había demorado en lograr poder cerrar su mente, una vez lo logró se notaba la emoción en sus ojos. 

Antes de pasar a la legeremancia, Sev decidió dar una pausa a su mente y centrarse mejor a que aprendiera a realizar el encantamiento patronus. Le tenía cierta fe a las habilidades de Stella. Sabía que no le saldría a la primera, cosa que comprobó unos días antes cuando lo intentaron y salió apenas un pequeño brillo plata durante esos intentos, pero sabía que le saldría algo más rápido de lo esperado.

Ese día, una pequeña estela de luz salió sin mostrar algún animal. Aún se trataba de un patronus no corpóreo. Una pequeña frustración invadió a Stella al ver que no logró mucho más allá de eso.

Severus notó aquello y se acercó a ella.

—Hey, sería mejor tomar un descanso y...

—Estoy bien, hagámoslo una vez más—dijo rápidamente para levantar su varita.

—Stella...—Sev la sujetó de los hombros despacio—. Si te frustras, no saldrá ¿Olvidas?

—Lo sé, pero quiero lograrlo—susurró bajando la varita.

—Yo sé que sí, pero será mejor que despejes tu mente y pienses en otras cosas—Severus la acercó a unos escalones del lugar—. Además, sé que tu mente no está enfocada en el recuerdo feliz.

—¿Entraste a mi mente o tanto se nota?

—Se nota, cuéntame—Sev se sentó en la escalera y ella se sentó.

—Bueno, nunca he lidiado bien con fallar—Stella jugaba con sus dedos despacio—. Mucho menos considerando cómo reacciona mi madre a la hora de reprobar...—le mostró sus manos con heridas—¿No te ha pasado que sales de un examen y todo lo que piensas es "lo voy a reprobar" da igual que te esforzaras y estudiaras?

—Sí, alguna vez.

—Pues esa es la constante—respiró hondo.

—¿En serio piensas eso? ¿Tú, de todas las personas?

—Sorprendente ¿No crees?—suspiró pesado y rodó los ojos—. Me criaron para ser la mejor, así que eso me lo tengo bien guardado. Mejor no mostrarle a nadie.

—Es por eso que me sorprende, me es difícil pensar en ti estresada o...

—¿Con ansiedad? Pues es más seguido de lo que parece.

—Lo siento.

—Lo aprendí a manejar y lidiar con eso sola—respiró hondo.

—¿En cuál momento feliz te estás centrando?

—Pues en el momento donde hice amigos.

—Suena bonito—dijo Sev mordiendo su labio—. Enfócate más en eso ¿Sí? Aquí no puedes fallar, no te voy a juzgar si no sale bien y no es una clase la cual puedas reprobar. Todo estará bien.

La Noble Casa BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora