Mi corazón comienza a palpitar más fuerte de lo normal, me repito que no es por nada, que no tiene nada que ver con el hombre que tengo delante pero sé que es mentira.—¿No hace mucho calor hoy? —Digo para excusar los sudores que estoy teniendo.
—Está nevando, Jaemin. —Ríe pero no de la forma a la que estoy acostumbrado, no se le entrecierran los ojos. Y, joder, me lo follaria aquí. —Yo tengo frío. —Junta ambas manos y se las lleva a la boca para intentar calentarlas.
—¿Quieres mi abrigo? —Intentó ser educado con él pero cuando asiente con la cabeza y le doy mi grueso abrigo me arrepiento al minuto. Empiezo a sudar frío y ya no se si sigo igual de cachondo que antes.
—Estas temblando. —Dice sonriendo, y esta vez si que se le nota en los ojos, causándome demasiada ternura.
—Que va. —Intentó parar de temblar pero mis dientes castañeteando me delatan. Noto algo cubrirme los hombros y la cabeza. Es mi abrigo y su gorro.
—Tienes las orejas muy rojas, pensaba que tendrías frío. —Se excusa, si supiera que la causa de mis orejas rojas no son el frío...
—Gracias... —Estoy avergonzando y ¡¿cómo no estarlo?! Solo pienso en el buen polvo que podría tener con él y Jeno siendo tan... tan...
—De nada. —Me pellizca levemente una mejilla y Dios. —Está haciendo demasiado frío, ¿no prefieres ir a mi casa y ver una peli? —Yo asiento con la cabeza, esperando que esa peli se convierta en algo más...
Pero aquí estoy, tumbado en el sofá del salón de la casa de Jeno, con un chocolate caliente en la mano mientras ambos vemos Love Actually en la televisión. Esperando que en cualquier momento se me acerque más de lo necesario y me meta mano.
La película acaba y en ningún momento ha pasado algo memorable más que Jeno llorando junto a Emma Thompson.
—¿Te ha gustado? —Sonríe mientras lava las dos tazas en la vajilla y yo estoy sentado en la mesada. —Es de mis películas favoritas. —Es todo tan romántico que no se que hacer, no se si debería ser así. Me siento hasta un poco mal por pensar solo en follar.
—Me ha gustado mucho. —Acaba de lavar y se seca las manos con el suéter demasiado ajustado que lleva puesto. Se acerca a mi y apoya una mano en mi muslo, pillándome desprevenido.
—Son las diez, ¿quieres que te lleve? No quiero dejarte solo caminando por la calle a estas horas. —¡Es tan caballeroso que ya no puedo mas!
—No quiero molestarte. —Le digo. Él, tras unos segundos, se acerca más a mi, dejando su cuerpo en medio de mis piernas.
—Tu nunca me molestas y lo sabes. —Me coge ambos muslos, me acerca más hacia él y uff.
—Jeno... —Ahora sus manos están en mi cintura y su cara casi rozando la mía.
—Me estoy cansando de intentar ser un caballero contigo, Jaemin. Quiero follarte ahora.
—¿Y por qué aún no estoy en tu cama? —Sonríe y pasa ambas manos por mis muslos para poder elevarme, yo enrollo mis piernas en su cadera mientras juntamos nuestros labios.
Me lleva a su habitación y, bueno, ya sabemos todos como acabó todo.
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trying be a man | nomin
Romancejeno siendo el ser más dulce mientras que jaemin solo piensa en follarselo. ;; one shot sin contexto.