Maratón 2/3
Sonó el timbre y la gente desapareció en a penas unos segundos. La clase se me pasó bastante rápido. A penas dimos temario, si no que el profesor Brown nos presentó la asignatura y en qué consistían los criterios de evaluación.
Cuando salí del edificio vi que el autobús ya estaba en la puerta, pero decidí no subirme. Era el primer día y no tenía prisa por volver a casa, así que pensé que sería buena idea volver andando.
Quizá era una idea un poco descabellada por el simple hecho de que no tenía ni idea de cual era el camino de vuelta, pero quería aprenderlo. A la ida en el autobús había tomado algunas referencias que me podrían ayudar, así que crucé la acera y retomé el paso camino a casa.
Cuando llevaba recorrida prácticamente la mitad del camino dudé sobre la calle que debía coger. Me paré en la esquina busqué la dirección en el móvil.
Empecé a escuchar un sonido que cada vez se aproximaba más a mí, parecía una moto. Giré la cabeza y al ver que no había nadie me dispuse a cruzar. Hasta que de pronto giró la esquina en la que yo me encontraba cruzando una moto. Me paralice y no tuve tiempo de reaccionar.
- ¡Joder!
Acabé en el suelo, con un golpe en la cabeza y el brazo derecho inmóvil.
- ¡Mierda! Yo... ¿Estás bien?
Cuando abrí los ojos para ver de quien era la voz que me hablaba no podía creerlo. De verdad que la situación no podía ser peor. Me había atropellado el malote de clase. El que ni se molestaba en disculparse por llegar tarde, sí, ese.
- Bueno, estoy tumbada aquí en vez de en mi cama, que es donde me gustaría. Pero sí, estoy bien.
Genial. No podía haber sonado más borde, pero no le debió sentar mal, porque soltó una pequeña risa.
Intenté levantarme, pero él me frenó.- ¿Me acabas de conocer y ya tienes ganas de irte?
En realidad ya le conocía. Aunque había quedado claro que él en clase no se había dado cuenta de mi existencia.
- Yo... tengo que ir a casa. Si no mis padres se preocuparán.
Seguía tirada en la carretera. ¿Como iba a ir a casa? A mis padres les daría algo si se enteraran de lo ocurrido.
- Dime el número de tus padres.
- ¿Para... para qué?
- Para contarles lo ocurrido. Te llevo al hospital, les diré que estarás allí.
¡No! No pueden enterarse de esto. Es mi primer día de instituto y... no quiero preocuparles.
- ¿Como te llamas?
- Mackenzie.
- Encantado Mackenzie. Ahora veamos, tienes un golpe en la cabeza que está sangrando y posiblemente alguna que otra lesión. Yo... yo soy el responsable de esto y ¿pretendes que no llame a tus padres? No te puedo dejar aquí así.
- Está bien.
- Voy a llamar a una ambulancia, no te puedo llevar así en la moto.
La llamada a penas duró un minuto. Le preguntaron detalles como si yo estaba consciente. Les dijo la calle en la que nos encontramos y le aseguraron que llegarían en pocos minutos.
- Ya vienen de camino, voy a llamar a tus padres.
- Deja que hable yo con ellos. ¿Puedes ayudarme a buscar mi móvil?
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Te Reto A Enamorarte
RomanceMackenzie, una joven de 17 años, se muda a Hollywood, donde terminará su último curso de instituto. Lo que ella no sabe es, que su nueva vida en la ciudad, le hará renunciar a cosas del pasado, experimentando cosas que nunca había sentido. ¿Consegu...