Y yo no tenía idea de lo que estaba a punto de pasar.
-¡T/N!-. Escuche gritar al profesor
- ¿Si maestro?-. Respondí dudosa
- ¿Podrías quedarte al final de la clase?-.
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- Si, maestro-. (respondí, aunque esto me causaba un mal presentimiento)
Toda la clase se la paso mirándome con una sonrisa algo coqueta, que me ponía en duda ¿Habría yo, tomado una mala desición, al aceptar quedarme?
La clase transcurrió con rapidez aunque sus miradas de vez en cuando no paraban, y una que otra vez, nuestras miradas se cruzaban por momentos.
Al finalizar la clase el maestro camino hacia mi, y se sentó a mi lado.
- ¿me necesita para algo profesor?-.
- Mmm note que me has mirado durante toda la clase-. *interrumpí*
-yo también e notado como me mira, vaya al grano, que sucede, que materia e reprobado, o ¿que necesita de mi?-. Respondí ya habiendo escuchado de mis compañeras que algunos maestros les han hablado sexualmente, sin embargo el era nuevo -Ese no es tono de hablarle a tu profesor, veo que eres una niña mala-.
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- ¿mala? No, solo un poco traviesa-. respondí conquetamente y con una sonrisa juguetona (debo admitirlo es muy atractivo, y si, pensar en el me vuelve loca)
