Simple. [Nightkiller]

°1°

Ver dormitar al esqueleto de lágrimas se le había hecho costumbre a Nightmare. Llamenlo loco, desquiciado o acosador pero para él era el único momento de calma en todo el día,donde no había inquietud,dolor o tristeza. Quizá algo de melancolía mezclada con coraje pero era algo calmante concentrarse en el rostro de Killer.

No importaba cuánto lo intentara, cuánto arrojará lejos de él al otro,ni cuan cruel fuera,él siempre regresaba a sus pies como perro fiel en qué se había convertido de a poco. A ese punto era el único que estaba a su lado incondicionalmente,fallando y levantándose uno al lado del otro todo más a voluntad del asesino que de si mismo.

La razón de querer alejarlo era porque sabía que no le traería otra cosa que no fuera desgracia y decadencia a su vida, también sería doloroso para él tener la sensación del amor recorrer su ser corrompido,de hecho ya lo era pero lograba mantenerse de pie, aún así no era suficiente. El alba ya se asomaba en el pequeño bosque donde habían ido a parar después de la batalla y con ello regresaba la rutina de siempre,suspiro fastidiado arrodillandose frente al otro esqueleto para acariciar su rostro aprovechando el sueño pesado que su contrario tenía sintiendo el solo roce doloroso.

—No eres nada silencioso ni sigiloso, jefe.— Se escuchó la voz adormilada de su subordinado burlándose de su poco silencio y modo de hacer las cosas. Evidentemente aquello no le había parecido a la pesadilla bien porqué de inmediato le metió una cachetada que a mí me hubiera prendido pero a Killer le había dolido bastante,el sonido incluso resonó por el bosque ahuyentando algunos cuervos y aves de alrededor.Todavia con ese manazo tuvo la valentía de reírse frente a Nightmare quien se había levantado de inmediato,volteandose y cruzándose de brazos viéndose como los tentáculos sobresalientes de su espalda moviéndose alborotados,en desorden señal de la alteración en sus emociones.

Estaba ruborizado por su error, más por la expresión tan encantadora que había puesto el otro en su momento. Admitía que era atractivo a su modo,cuando peleaba era su momento favorito,se quedaba hipnotizado ante cada movimiento pero no era tiempo de pensar en eso sino de controlarse.

—No digas tonterías y levantate,hay que avanzar—

—¿Ni un besito de buenos días?—.

Esta vez no fue una cachetada,solo un tentaculazo lo que recibió en la cara haciendo reír al de lágrimas. Tomo la extremidad en sus brazos y lo abrazo acariciándolo suavemente sin ser retirado,aquello era del agrado del chapopote y ambos lo sabían. De ese modo inicio la caminata por el lugar para despertar del todo y de paso ver si había alguien alrededor.

El simple hecho de poder pararse detrás del chapopote era increíble para Kill,el cielo poder sostener algo que fuera de él teniendo la excusa de que de ese modo no se perdería siendo una completa mentira,solo quería sentirse cercano. Night también parecía sentir algo hacia él. Era evidente que notaba la constante mirada sobre su ser antes de caer rendido ante el sueño y al despertar con el amanecer. Tambien sabia de las caricias dadas mientras él "dormitaba",cada una la había disfrutado y atesorado. Todo eso le daba la esperanza de poder ser algo más que un simple subordinado,le hacía querer quedarse en parte y aguantar tal como palmera en huracán cualquier cosa a lado del ser negativo. De todos modos no parecía ser suficiente,¿Que más debía hacer para comprobar su lealtad?

—¿Algún día me vas a aceptar?—. Cuestionó de repente Kill parando en seco al hundirse tanto en sus pensamientos aferrándose al tentáculo,viendo la espalda de su jefe quien ni si quiera se digno a verlo.

—No digas tonterías— Repitió intentando avanzar siendo detenido por el otro.

—Estas equivocado,no son tonterías ¡Yo de verdad quiero!— Se estaba acercando por detrás a Nightmare siendo detenido por el mismo al envolverlo con el tentáculo para estrellarlo contra un árbol con fuerza.

—¡QUÉ TENGO QUE HACER PARA QUE TE ALEJES!— Vocifero la pesadilla acercándose al árbol con la expresión hecha una masa horrible. ¿Qué quería el otro para alejarse? No entendía.

—¡SOLO LÁRGATE Y ALEJATE COMO TODOS MIERDA!— Le dio un puñetazo al árbol y enseguida soltó a Kill dejándolo caer al suelo mientras se daba vuelta mostrándose inestable.—Solo largate— Murmuró escuchando como todo a su alrededor se volvía silencioso al pasaré algunos minutos. Asumió que el asesino finalmente se había dado por vencido e ido por la nada alrededor,dolió pensar en esa posibilidad pero eso era lo que él había pedido desde un inicio.

Sorprendentemente unos brazos rodearon su cadera y un mentón se anclo a su hombro.

—No me puedo ir,ya te había dicho que me quedaría y te serviría hasta mi último aliento ¿Se te olvidó,jefe?~—

Pronto un suave beso se posó en la mejilla pegajosa de Night siendo el cielo en la tierra para ambos pero seguramente supo a chapopote o petróleo.

Con cualquier otro toque ya habría atacado a matar,pero con Killer no estaba la sensación pesada,mareante y dolorosa que con otros. Con él era cálido,suave y algo agrio pero aún así le gustaba. ¿Debía volver a abrir su corazón? Quizá ese idiota se lo merecía,se lo había ganado después de tanto tiempo además tanto drama en su relación lo estaba fastidiando. Ya había intentado todo lo que pudo para alejarlo en vano, significaba que podía tomarlo como suyo ¿No es cierto?.

—Si intentas largarte,te mato— Amenazó  en falso volteandose para corresponder al contacto.

—Entendido— Fue una risita lo que respondió aquello sabiendo que no iba en serio,había aprendido a conocer sus señales y lo que quería decir con el tiempo,amando cada detalle de su personalidad incluso si parecía horrible él lo encontraba encantador,incluso precioso.

En esos momentos su alma se regocijaba de gusto por ser aceptado finalmente.

Se separaron mirándose,Kill encantado y  Night viéndose reacio a alguna muestra de su enamoramiento,aunque el rubor verdoso lo delataba.

Un simple beso bastó para cerrar ese pequeño "trato" en medio del bosque,bajo la sombra de los árboles y la luz del amanecer llegando a ellos pareciendo algo de ensueño incluso para dos desgraciados como ellos. Era perfecto a final de cuentas bastando el estar juntos.