ᴛʜᴀɴᴋ ᴍᴇ ʟᴀᴛᴇʀ | ᴊᴀʏɴᴏᴏ

➷ Trois

Al ver el mensaje decidió ignorarlo, no era el tipo de persona que le contestaba a un completo desconocido, había visto tantas películas de terror que sabía que nada bueno salía de eso, pero al notar el contexto decidió darle una segunda oportunidad escribiendo rápidamente una respuesta.

Creyendo que ya era algo tarde y que la persona no le contestaría comenzó a dirigirse hacia su habitación sacando un pijama y tendiéndolo sobre su cama antes de ir hacia el baño y asearse.

De nueva cuenta su celular anunció una notificación haciendo que lo tomara en manos, la pregunta lo hizo confundirse levemente.

— ¿Para que quiere saber si conozco a Jay? —En ese momento Kim estaba arrepintiéndose de su decisión— ¿Que es lo peor que podría pasar si le digo que si? Dudo mucho que sea un asesino.

Ignorando ese sentimiento de incomodidad en su pecho comenzó a escribir, deteniéndose de vez en cuando al creer que debería ponerle un alto a esto y bloquear el número, pero ya era muy tarde ¿no?

Después de unas cuantas horas hablando con la persona al otro lado de la línea decidió preguntarle por su nombre, este diciendo que lo llamara "garden" confundiendo un poco al chico no sin antes dejarle en claro que solo hacia esto porque inicio una relación con Jay y quería saber si era una buena persona, y eso llegó al corazón de Sunoo sin darse cuenta de que podría ser una muy mala idea el brindarle información al desconocido únicamente por sentirse mal.

— Yo también hubiera querido que me advirtieran sobre cómo es —suspiró viendo la única foto que conserva de él y Jay juntos— en verdad eres un demonio vestido de ángel, pero este chico me dará las gracias, ¿verdad?

Su gata se sentó a su lado viéndolo expectante, a veces sentía que Piper era más como un ser humano que como una adorable minina, parecía siempre escucharlo y cuidarlo.

Con cuidado posó su diestra sobre la cabeza de la calico sintiéndose feliz de tener su compañía.

Jay se encontraba completamente destrozado, aún recordaba perfectamente el rostro de Sunoo al verlo besándose con Jungwon, como Kim lo jaló de su suéter para obtener una respuesta pero consiguiendo únicamente palabras de parte de Yang, se odiaba a sí mismo por no haber abierto la boca y decir que era una mentira y que aunque no le creyera, que el sabía que nunca le haría algo así, no cuando estaba a punto de pedirle matrimonio, no nunca, decirle que lo quería tanto que después de dos años de relación sentía que ya no podía estar sin el en su vida y lo quería en ella por siempre, pero la cobardía por no arruinar la empresa de sus padres y las inversiones de los padres del castaño con un escándalo a ese nivel hizo que se quedara mudo y solo viera a su verdadero amor sollozar y gritarle a un chico con un rostro angelical e imagen inocente pero horribles intenciones.

— ¿Todo bien? —habló Geonhak entrando al despacho del menor— Keonhee me contó que cancelaste todas las reuniones para esta semana, ¿porque harías eso? Eres el mismo que odia no atender a los inversionistas, más cuando te esforzaste tanto en algo.

— Geonhak me siento un asco, desde que el se fue ya no puedo trabajar bien, mira a tu alrededor, solo mira —señaló la oficina comenzando a desesperarse— no es igual sin sus fotos, sin su alegría, si Keonhee te dejará seguramente harías lo mismo.

— Jay, te comprendo pero ¿al menos intentaste hablar con el?

— Varias veces y me manda a buzón o si voy a su departamento no me abre, lo fui a buscar a su universidad y me negaron la entrada.

El rubio negó un poco tomando asiento frente a su mejor amigo y sirviéndole un poco de agua de la jara que descansaba en el escritorio, el conoció a Kim, de hecho Jay y Sunoo se conocieron por medio de Keonhee, su novio, porque el había ido a la misma preparatoria que el pelinegro y mantenían una amistad cercana, el chico era un completo rayo de sol, todos amaban cuando visitaba la empresa por la alegria que traía al lugar, no como con Jungwon que todos odiaban su presencia, el trato era tan distinto y Yang en verdad se sentía mejor que todos por ello todos lo ignoraban si era posible y acataban órdenes de Park, solo querían evitar problemas.

— Señor Kim llegó su cita de las cuatro —anunció Goeun entrando a la oficina y haciéndole una reverencia a ambos antes de salir—

— Todo mejorara, eres Jay Park, siempre encuentras la manera.

Y sin más Geonhak salió de ahí cerrando la puerta detrás de él, Jay al estar completamente solo lanzó un marco de fotos de él y Sunoo, estaba harto de la situación, ¿porque no podía simplemente ir en contra de los deseos de los demás?

"Cuando necesites con quien hablar puedes contar conmigo, yo siempre estaré aquí, nunca me iré Jay, porque te amo y nada cambiaria eso."

— Inclusive tú me mentiste —susurró— pero te haré ver que lo que sucedió con Jungwon no fue más que estar en el lugar equivocado en el momento equivocado, ya verás.