Orlando

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Capítulo I

Orlando.

-No podemos sacrificar a uno de nuestros mejores hombres... -Protestó una voz, pero todos sabían que esa voz era solo para aparentar. Realmente nadie pensaba así, pero para los annales de la historia... Alguna voz tendría que sonar opositora.

-El ya quedó tras las líneas enemigas, lo que le suceda, es tema suyo. -Informó uno de sus contrapartes como si solo hablara del clima. Sin él, su hijo podría avanzar más y captar la posición de héroe del país. Él solo sería un soldado más que se había sacrificado por la patria, ya era un secreto a voces para los altos mandos que los gobiernos estaban hablando de una tregua.

La guerra había tomado muchos recursos, los que pudieron aprovechar esta situación la habían aprovechado. Habían exprimido los recursos hasta el máximo permitido, seguir sosteniendo esta guerra ya requería que tocaran los bolsillos se cierto grupo de personas (las cuales los funcionarios mismos integraban o tenían conocidos y familiares que integran dicho grupo). Ya habían llegado al punto de que si querían avanzar, ya no podrían sostener la guerra sin recurrir a otros medios de recaudación. Junto al hecho que la otra nación, parecía aún tener muchos recursos para seguir en pelea. Solo por que se autoproclamaban una nación "pacifista" es que estaban dispuestos a hablar de paz... Por una vez todos estaban de acuerdo que esos tontos pacifistas amantes de la igualdad, y todas sus estupideces allegadas, eran útiles para algo.

-¿Y qué hay de Cyrus? Esa máquina vale millones y está tras las líneas enemigas. -Argumento un tercero.- Si no recuperamos el mechaguerrero, perderemos una inversión millonaria.

-El Cyrus, ha estado en el campo de batalla por cinco años, ya se podría considerar una reliquia. -Replicó tranquilo- Puede que una vez todo terminado podrás recuperarlo para exhibirlo en un museo, solo será un montón de chatarra en este momento. -Le dio un trago a su bebida- Él se quedó atrás para permitir la retirada de sus camaradas, se sacrificó por el país... tanto él como el Cyrus ya perdieron su utilidad.- Argumento, aunque bien sabía él cómo era que Cyrus y su piloto se quedaron atrás. Pero a nadie le importaba realmente, no era necesario registrar la verdad en los libros de historia.

...

-Despierta bella durmiente -La bofetada llegó, lentamente de sus ojos se fueron despejando la oscuridad que gobernaba su mente. Movió sus muñecas para confirmar lo que su cuerpo le estaba diciendo. Estaba esposado, pero estaba esposado de frente cosa que le sorprendio.

-Supongo que es momento de jugar al prisionero ¿No? -Alzó la vista y observó a quien tenía delante, sus pupilas se contrajeron un poco por la sorpresa. Eso que el hombre tenía en el cuello, era un collar. Una de las grandes diferencias entre sus naciones, radica en cómo estas veían a las personas. El alto oficial que tenía delante, era un omega. Algo imposible en su país.

Y por cierto, no era un omega muy atractivo.

-No soy partidario de esos juegos, soy más partidario del trato cariñoso, me gusta que me mimen. -Las risas a su alrededor no se tardaron en pasar.- Todos los aquí presentes me deben 100, gracias por ser tu. -Dijo mientras se incorporaba y llevaba a cabo una sana distancia con el.

-¿Por ser yo?

-Les aposté a todos, que los cinco pilotos de sus preciosos "dragones" eran Alfas. -Saco una libretita y anoto- Y tu eres el piloto que me faltaba confirmar.-Se alejó y caminó hacia la puerta- No tengo la política de matar prisioneros de guerra, a diferencia de ustedes que no dudan en fusilar a los nuestros o ponerles correa de perro. -Claramente lo último iba por los soldados omega capturados (Era un secreto a voces que si estos eran "bonitos" terminarían como los juguetes de algún oficial)

El ejército enemigo es muy peculiar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora