Oneshots xingyun | 2

rises the moon

El día parece nunca acabar, el papeleo es como si nunca hubiera sido maniobrado, incluso cuando el cielo se oscurece la luna me recuerda a ti.

Mis días se desvanecen como una mancha de tinta entre los pergaminos. La sensación de soledad persiste y me persigue, como un no acabar. La imagen del exorcista que suele acompañarme se queda en mi mente. Brillando entre el humo de mis recuerdos, chongyun ¿cuando acabará este castigo? Anhelo ver esos ojos de hielo que me miran con tanto afecto sin importar lo que haga.

–ven cielo, cierra tus ojos cansados– Lo cargo al estilo nupcial, la verdad es que xingchiu había estado en un accidente en el cual una parte de su cerebro no es capaz de integrar más recuerdos, se quedo estancado en el día en el que fue castigado alejado de chongyun. Desde ese momento yun se quedaba en casa de él para cuidarlo, el joven se emocionaba de verlo. Pero a la vez se preocupaba de esconder al chico para no ser atrapados o castigados. Si supieras que estaba allí porque hace mucho podrías ser libre de ese trabajo.

–yunyun, si estas aquí..podrían evitar que nos volvamos a ver, vete–lo empujo débilmente intentando que lo suelte, pero el exorcista ya acostumbrado a esta situación lo acostó abrazándolo.

–cierra lo ojos y duerme de una vez xing, estas soñando.. debes volver a despertar y para ese momento, quiero que sepas que te estaré esperando– El heredero asintió cansado comenzando a cerrar sus ojos. Se mataba trabajando en el papeleo para irse con chongyun cada vez que despertaba.

–te prometo que algún día encontrare la forma de que salgas de ese momento– le acaricio la mejilla, y de paso la limpio al notar que otra vez caían lágrimas de los ojos del joven. Se esta desvaneciendo, cada vez más. El miel olvida cada día junto a chongyun e inicia cada día para irse con él.

Recuerda la vez que le contó lo que había ocurrido y que ya habían pasado dos años del accidente y cada día era lo mismo. El miel no paro de llorar abrazado al exorcista lleno de miedo de volver a olvidar lo.

–respira, respira, respira cielo–le beso los labios aferrándose a su pareja. Hace tanto no podía disfrutar de saber que xing estaba allí con él.

–me estoy ahogando chongyun, no puedo seguir si sé que mañana olvidare lo que viví contigo– yun en ese momento sabia que el joven sentía como si todo estuviera mal, que cada vez que pasen más años será más difícil. Al menos tenía el alivio de que su amado yun estaba con él.

Los días se vuelven brillantes, como hielo de espina dragón frente al sol. El azul es feliz al saber que el celeste esta con él. Aún cuando en su cabeza es el mismo día en el que no puede verlo.

–entonces dime ¿crees que él algún día deje de...?– pregunto el dueño del gremio de comerciantes al médico frente a él.

–lastimosamente dudo que deje de ver al joven fallecido exorcista, la fantasía que creo en su cabeza ante el shock del accidente y de verlo muerto deben haber causado esto– estaban mirando tantos papeles sobre la poca información que tenían de salud mental.

–pero debe haber alguna forma– se quejo el hombre golpeando la mesa con los puños.

–lo lamento, pero la fantasía autoimpuesta es la defensa de su mente ante el shock, ni yo ni nadie puede curarlo, solo él. Cuando acepte que su pareja ya no esta en este mundo– El hombre se cubrió el rostro lleno de frustración y tristeza, era su culpa que esa tragedia ocurriera ya que ese día les grito a ambos que no les dejaría estar juntos. Escaparon y cuando los perseguían uno de sus guardias "sin querer" atravesó el pecho del hijo de la familia de exorcistas. Luego de que intente escapar cargando al joven cayeron por un barranco y fue protegido por el celeste quien terminó por morir. Al atraparlo él no paraba de llorar. Desde entonces, hace sus trabajos y le habla a los sirvientes que a la tarde saldrá a caminar con su amado. Que cuando termine el castigo que le dejaron podria irse a caminar con su chico. Incluso algunas veces lo vieron abrazando el regalo que le dio el joven sin parar de llorar o hablar como si el chico estuviera frente a él, le daba las gracias por el regalo y sonreía enamorado. No les daba miedo, sentían una profunda tristeza, su rebelde y apasionado amo estaba atrapado en su mente jurando que su amado aun estaba vivo.

–¡ya entiende lo de una vez! Chongyun no está, él murió– Agitaba agarrando los hombros del azul quien cambio el rostro a uno inexpresivo.

–no entiendo de que hablas padre, yunyun esta entrenando en su casa– el hombre envió a los guardias a que arrastren al joven amo hasta la tumba del chico. Asumió que exponerlo a la verdad haria más rápido esto, ya habían pasado dos años era bastante tiempo según él para superar algo así.

Al dejar al chico frente a la tumba, camino lento hasta que leyó el nombre en ella. Se giro para mirar a chongyun con miedo aunque lo veía borroso por las lágrimas.

–¿que se supone que es esto yunyun?– los guardias se miraron entre ellos alejándose un poco para darle espacio. El chico no paraba de secar su rostro ahogándose entre sus lágrimas. Pronto se levantó rápido y comenzó a correr hasta que llegó a la casa de chongyun, alli golpeo la puerta hasta que abrieron y al verlo se quedaron en completo silencio.

–yunyun ¿esta aquí?¿Verdad?– su voz estaba rota y la tía shenhe que fue quien abrió la puerta apreto los labios evitando llorar. Se acerco y abrazo al chico negando.

–comencé a vivir aquí desde que él ya no esta más. Lo lamento– Estuvo 20 minutos consolando al joven que se quería morir, el día en que todo ocurrió se repetia en su cabeza una y otra vez, la imagen del cryo lleno de sangre tirado a su lado, con sus ojos sin vida y con una sonrisa despidiendo al heredero. Se estaba rompiendo, la fantasía que tanto se esforzó por crear su mente para protegerlo.

Cuando se separó de la mujer, camino hasta la cima de una colina hasta mirar el acantilado. Los guardias lo habían perdido hace mucho así que no le interesaba. Yun apareció otra vez, pero él solo le sonrió llorando una vez más.

–te amo chongyun – se acerco más al acantilado quitándose su visión hydro y lanzandola lejos de la orilla.

–te amo mucho más xingchiu– una sonrisa se formo entre los labios del azul que salto a una muerte segura. Al menos ahora de verdad estaría con chongyun.

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Wn me rompi algo escribiendo esto, así que no lo voy a leer. Si le encuentran algo mal pues me avisan ydkeh me re dolió