Juicio parte 1/2

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Sesshomaru se había quedado dormido en esa pequeña celda, todo tranquilo hasta que la celda fue abierta, por supuesto un grupo de policías lo estaba mirando, y claro, lo despertaron para llevárselo.
Sesshomaru estaba totalmente confundido por lo que estaba pasando, era injusto que lo metieran preso por matar a un hombre que a cometido más de un crimen, además él salvo a Rin y sin duda, a Kohaku sin querer, es decir, lo arrestan a él y no a los que de verdad lo merecen, estaba más que claro, que aquí el sistema no estaba funcionando como debería.

Sacaron a Sesshomaru de esta celda, salieron de la comisaría y lo llevaron a una patrulla.

Despues de una largas horas de viaje, llaveron a al joven directamente a prisión, ahí estaría bajo vigilancia y completamente solo, sin que nadie viniera a hacerle algún daño, le habían quitado todas sus pertenencias, le habían cambiado la ropa, y privado de casi todos sus derechos, todo esto hasta que se le juzgará.

Irasue al contestar el llamado de que su hijo estaba preso, llamó de inmediato al abogado más prestigiado de Japón, ella ya había llegado a casa cuando recibió el llamado, así que pasó por la habitación de Rin, para avisarle que iría a prisión para ir a ver a Sesshomaru, Rin no alcanzó a preguntarle que estaba pasando, ella solo avisó y se fue, dejandola nuevamente con Jaken.

Sesshomaru miraba la celda a la que lo habían metido, no era una común, era de alta seguridad, estaba solo, todo era blanco excepto la frazada de la cama, el colchon era muy delgado y no tenía almohada, Sesshomaru no se sentía asustado, sentía preocupación, él se sentó en aquel delgado e incómodo colchón, no tenía ninguna ventana por donde mirar, la puerta tenía una venta con con vidrio blindado.

Él no tenía ya nada más que hacer, solo esperar a que alguien viniera y le dijera algo, o que su madre llegara pronto a por él, Sesshomaru solo se recostó, se acomodo lo mejor posible en esa terrible cama, cerro los ojos hasta por fin quedarse dormido.

Pero antes de esto, alguien tuvo su primera visita, Kohaku quien se fue preso el mismo día en el que murió Takemaru, Miroku le abrió la celda de Kohaku, dejando entrar a Sango.

—Tiene 30 minutos desde ya señorita Sango— Dijo Miroku mirando su reloj, Miroku se quedo esperando.

Sango al entrar lo primero que izó fue abrazar a su hermano, con mucha pena y preocupación por el, se sentía culpable de todo lo que le estaba pasando a Kohaku. —Perdóname Kohaku, debí protegerte y preocuparme más por ti...—

Kohaku no dijo nada, solo correspondió el abrazo, mientras que sus ojos corrían algunas lágrimas, por supuesto que no, no era culpa de su querida hermana, era culpa de él, que no se puso a pensar en las consecuencias de hacer tratos con quienes no se debía, ahora su hermana pagaba las penas.
—No, esto es mi culpa Sango— Kohaku se separa del abrazó. —Yo... debí hablar cuando pude—

Miroku observaba la escena, mantenía una grabadora escondida en su bolsillo, necesitaba pruebas para continuar con la investigación y así, encontrar a Naraku, claro si es lo lograban encontrar.

Kohaku se reincorporó —Primero había hecho tratos con Takemaru, pense que si vendía lo suficiente, al fin podriamos vivir mejor, pero luego llegó ese tal Naraku y... dijo que yo ya no estaría a cargó de Takemaru, que él se haría responsable de todo lo que me pasara— Kohaku se seco las lágrimas, respiro hondo y continuó. —El... no se como pero se hizo profesor en la escuela y al parecer era muy prestigioso—

Miroku se acercó —¿Y por qué capturo a esa niña?— Preguntó Miroku con total seriedad, quería llegar a lo más profundo.

Kohaku lo miró —Ella me gustaba... pero es la novia de Sesshomaru, Naraku decía que odiaba cada vez que decían el nombre de Sesshomaru u el nombre, de su padre o hermano menor... no recuerdo el nombre del hermano menor—

El Destino De Conocerte (Sessirin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora