niñero • +18 • Jimin y tú

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- Es una estupidez mama, ya no soy una niña.

- Pues te comportas como una, no podemos dejarte sola porque siempre te metes en problemas.

- ¿Pero un niñero? ¿NO TE PARECE QUE ESTAS EXAGERANDO?

- No, fíjate que no, al contrario, esto me parece lo mas maduro que puedo hacer, así que prepárate, porque mañana tu padre y yo iremos de viaje y tu te quedaras con tu niñero nuevo.

- Pero mamá

- Pero nada, ya lo dije - dicho eso salió de mi habitación cerrando fuertemente la puerta.

Yo con todo el coraje del mundo guardado dentro de mi, me acosté y quede dormida.

Creo que olvide presentarme como se debe, mi nombre es Lee ____, tengo 17 años y vivo en Seúl Corea, digamos que mi relacion con mis padres no es muy buena, pues siempre están viajando por cuestión de negocios, no me quejo ya que gracias a eso tengo todo lo que tengo ahora, pero creo que todo estaría mejor si tan solo me prestaran un poco mas de atención.

Hace poco cometí el error de pensar que invitar un chico a casa era buena idea, mas sin embargo al momento de entrar juntos a casa me sorprendí al ver a mis padres en la sala de estar.

No me dejaron explicar absolutamente nada y sacaron sus propias conclusiones, dijeron que era una zorrita y que metía a un hombre nuevo a la casa todos los días, en conclusión, no merezco ser cuidada por un niñero.

Muy seguramente será un hombre de 80 años, divorciado, con 15 hijos y rabo verde, no se quien es, pero ya lo odio con toda mi alma.

Al día siguiente

- En un rato vendrá tu niñero, pórtate bien y nada de jueguitos, tu padre y yo ya nos vamos, por favor deja de usar esas faldas tan provocativas, no te quiero usando eso, ve a cambiarte. - dijo mi madre molesta.

- Si, como sea - no dijeron nada mas, solo salieron de la casa con una prisa notable, pues iban tarde para tomar su vuelo.

Perdí la noción del tiempo, hasta que escuche que tocaron la puerta, fui a abrir esta y detrás me encontré a un chico pelinegro bastante atractivo.

- Perdona ¿Es esta la casa de los Lee?. - pregunto mientras miraba un papel y con la otra mano sostenía una maleta.

- Mmmm, si es aquí ¿Puedo ayudarte en algo?.

- Supongo que tu debes ser ____ ¿No? - solo me limite a asentir - Mucho gusto, mi nombre es Jimin, Park Jimin, y seré tu niñero

Oh por dios, este hermoso chico será mi niñero, no puedo creerlo, no parece ser un señor de 80 años, divorciado, con 15 hijos y rabo verde.

- Supongo que pasa - me hice a un lado dejándolo pasar.

- Tengo que decirte que la verdad esperaba que ____ fuera una pequeña niña, ya veo que me equivoque - dijo riendo

- Bueno, yo creía que me iba a cuidar un señor de la 3ra edad, ya veo que me equivoque.

- Puedo saber, si no es mucha molestia, ¿Qué edad tienes?

- ¿Enserio no te dijeron nada de mi?

- Claro que me contaron de ti, solo me dijeron tu nombre y que nada sale ni entra de esta casa, literalmente solo eso me dijeron - yo bufe molesta.

- Tengo 17 años.

- ¿17 años? - Asentí - ¿No eres algo mayor para tener niñero?

- ¿No eres algo joven como para ser metiche?

- Ya veo porque necesitas niñero ¿Cómo sabes que soy joven? ¿Tus padres si te hablaron de mi? - dijo mientras se dirigía a la sala de estar a sentarse cosa que yo imite

- ¿Me creerías si te digo que tampoco me hablaron de ti? De hecho creí que ibas a ser un anciano apestoso.

- Fingiré que no dijiste eso - me miró de forma extraña y luego miró a otro lado.

- ¿Entonces que edad tienes? - pregunte

- ¿Qué edad me calculas? - comentó mirándome de arriba a abajo.

- Tu cara dice que tienes al rededor de unos 25, pero tu actitud dice que tienes unos 28.

- ¿Enserio? - Asentí - Auch, pues te equivocas, me agregaste bastantes años, tengo 19.

- ¿Por qué alguien de 19 años cuidaría a alguien de 17?

- Bueno digamos que yo suelo cuidar niños pequeños en mi tiempo libre, me gusta mucho divertirme con ellos, además de que gano dinero haciéndolo, acepte cuidarte a ti porque pensé que eras una niña pequeña, además tus padres me pagan muy bien.

- Si, como sea, iré a darme una ducha, supongo que puedes esperar mientras vez tu teléfono, en ese sofá esta el mando de la televisión, por si quieres ver algo

Dicho eso, me pare y me dirigí a mi habitación.

Narra Jimin.

____ se levanto del sillón y ella por lo visto no se percato de que el borde de su falda se levanto un poco provocando que inconscientemente mi vista se bajara a ver su trasero y sus bragas rosadas robándome un suspiro, de inmediato baje mi mirada viendo como algo comenzaba a levantarse.

¿Cómo podre pasar tanto tiempo a solas con una sensual joven de irresistible cuerpo y actitud, que es casi de mi edad a solas? El hecho de pensar eso me abrumaba.

Si bien amaba cuidar niños, jamás pensé que podría pasar por esta incomoda situación alguna vez, así que sin mas decir, me dirigí al baño para arreglar mi pequeño problema