Capitulo 12
Una confesiónJohnny estaba gritando de felicidad en su habitación, al parecer su truco barato de películas románticas había funcionado. Con una sonrisa boba de niño enamorado miraba el techo de su habitación.
«El baile de Halloween es en unos días» pensó Johnny «Quiero que Daniel vaya conmigo»
Sacó de su armario su disfraz de calavera, que ya tenía planeado ponerse junto con sus amigos y lo admiro brevemente.
Daniel estaba hecho un tomate, no podía creer lo que acababa de hacer.
¡Le dió un beso a Johnny! Eso definitivamente no era muy bueno.
«¿Y si me rechaza? ¿Y si no le gusto de esa forma? ¿Y si me pase de la raya y ya no quiere ni verme?» esas y muchas preguntas más se hacía Daniel, las piernas le temblaban y su respiración no era regular.
Decidió que lo mejor sería tratar de dormir antes de que algo le diera. Al cerrar los ojos y caer en brazos de Morfeo, su mente ni dormido lo dejo en paz. Cierto rubio se apareció en el metraje de su mente.
—Hola Danny boy— le dijo el Lawrence imaginario.
—¡Johnny!— le saludó alegremente —¿Qué traes puesto?- preguntó el moreno al ver la ropa que llevaba el rubio, la cuál, era nada más y nada menos que un disfraz de bombero sexy.
—¿Esto?— le preguntó de vuelta —Es mi uniforme Danielito.
—¿Para qué?— y de pronto unas grandes llamas se encendieron detrás del cabello dorado. Iluminando los pectorales al descubierto y el cabello rubio, mostrando a Johnny como algo casi celestial, lo cual no tenía mucha lógica debido a que debería hacer contraluz, pero esto era un sueño.
—Para el incendio— contestó como si nada y tomando una manguera de agua, corrió hacia el fuego, abrió la llave y apunto a las llamas ardiente, el sudor en su cuerpo sumado a el agua que recorría su tonificado cuerpo, prendían a Daniel, de una manera diferente claro.
Una vez apagado el fuego, Johnny regreso dónde Daniel.
—Vaya, si que eres bueno apagando incendios.
—Sí, y ahora debo apagar el fuego.
—Pero ya lo apagaste Johnny.
—Me refiero al fuego que hay en ti, y tengo una manguera especial para eso— dijo y saco su miembro de entre los pantalones de bombero. —Tranquilo, soy un profesional.
Entonces jaló del cabello al menor y lo estampó contra su enorme verga. Daniel no perdió el tiempo y comenzó a chupar aquel falo como si no hubiera un mañana. Sin darse cuenta, ahora él estaba desnudo y al levantar la vista, se dió cuenta de que ahora Johnny estaba vestido de un camarero muy sensual, con casi nada de la cintura para arriba más que el moño negro que adornaba su cuello, y sostenía una bandeja en su mano izquierda. Daniel dejó de mamar algo confundido por el cambio en el atuendo de su pareja.
—¿Johnny?
—¿Qué sucede? ¿No le está agradando el servicio?
—Por el contrario— contestó Daniel, y Johnny de la bandeja tomó una botella de crema batida y llenó su pene con la dulce y espesa mezcla blanca. —Que buen servicio— dijo Daniel metiendo el miembro completo dentro de su boca.
Mientras hacía su felación poco a poco la crema dulce iba volviéndose esperma dentro de su boca.
—Te gusta mucho mi zanahoria, ¿no LaRusso?— dijo seductoramente el rubio, y Daniel se dió cuenta que ahora llevaba una diadema de orejitas blancas de conejo entre sus cabellos dorados, y un corsé femenino negro que tapaba todo su abdomen y su pecho; además aumentaba el tamaño de sus (de por si grandes) pectorales bien ejercitados. —Creó que es la hora de brincar— dijo Johnny empujando al pelinegro.
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Pretty Boy (Niño bonito) LawRusso
FanfictionDaniel LawRusso es un chico pobre de Reseda, de diecisiete años, su madre apenas tiene para darles de comer. Para mantener a su madre, Daniel tiene un trabajo por las noches, es un meretriz, un prostituto, pero no para mujeres, Daniel ofrece su tras...