- ¿Ya has encontrado algo sobre su paradero? -preguntó Chuuya desde el marco de la puerta de la oficina del castaño-
- No -respondió con simpleza- ¡Mori no deja de mandarme papeleo que debo entregar el mismo día!
Soltó un largo suspiro mientras apoyaba los codos sobre el escritorio que se encontraba frente a él, sosteniendo con sus manos su cabeza mientras enredaba sus largos dedos en sus hebras castañas
- ........ has revisado las cámaras de seguridad? -Susurró el pelirrojo lo suficiente para que el castaño lo escuchara-
- Cada una de ellas pero me duele demasiado la cabeza como para seguir, necesito un descanso...
Chuuya a paso lento se acercó a donde se encontraba sentado Dazai, viendo sobre el hombro las hojas que se encontraban depositadas sobre aquel escritorio
- Es raro que a alguien como tu le duela tanto la cabeza como para no poder seguir
- ¡¿Y que quieres que haga?! ¡Estoy desesperado! -exclamó-
- ¡¿Y crees que yo no?! _______ en poco tiempo se volvió alguien importante para mi también, es como una hermana pequeña y necesito saber donde está
- ...... Yo...
Sus palabras fueron cortadas cuando escucho unos pasos aproximándose, lo que hizo que ambos levantaran la guardia
- Oh pero si esta Chuuya también aquí -exclamó Mori adentrándose en aquella oficina- que sorpresa, considerando que son como perros y gatos
- Qué quieres Mori -preguntó Dazai con clara molestia-
- Vengo a dejarte estos documentos -sonrió levantando y mostrando la gran carpeta que ocultaba tras su espalda- la necesito lo más pronto mi querido Dazai.... Ni me falles
Y con ello dejo aquellos documentos en manos de Chuuya para hacer entregada a Dazai que realmente estaba a unos pasos de él
- ¡Ojalá se muera! -dijo Dazai exaltado una vez haya comprobado que nadie se encuentre a los alrededores, excepto ellos dos- como voy a entregar tantos documentos en un solo día
Por su lado Chuuya observaba aquellas hojas que fueron depositas en sus manos con suma atención
No eran pocas hojas, a decir verdad estaba seguro que ni siquiera eran tan importantes como para que Mori exigiera que el castaño las terminara en un día, y considerando las que ya estaban en el escritorio, no tuvo más opción...
Tomó asiento frente al castaño y agarró uno de los bolígrafos que ahí se encontraban y empezó su labor
- ¿Qué haces? -preguntó el castaño-
- Pensé que era obvio imbécil..... te ayudaré con esto -respondió en tono suave-
- ¿Cómo porque harías eso?
Chuuya tuvo que inhalar y exhalar un par de veces para no matar al otro chico en ese mismo instante
- Quiero que encuentres pronto a ______ y no podrás hacerlo si estas exhausto -respondió con simples a volviendo a lo suyo-
- ¡Pero Mori....!
- Mori en ningún momento dijo que no podías tener ayuda, además no tiene porqué saberlo, apuesto que ni revisará los documento cuando se los entregues ¿o si?
- No... La verdad es que.... no creo que lo haga.... ¡soy tonto!
- Eso ya lo sabía, ahora date prisa que tengo un plan -dijo sin separar la vista de las hojas-
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ᴍɪ ʜᴇʀᴍᴏꜱᴀ ꜱᴀʟᴠᴀᴄɪóɴ ✰[BSD]✶
FanfictionQuien diría que después de tanto tiempo sufriendo alguien te salvaría de ese infierno poco después de que cumplieras once y ese alguien es Osamu Dazai quien celebraba su cumpleaños número 16, cuando a su Jefe se le ocurre darle de regalo una mujer...