Parker

Capítulo 4: el nuevo.

La semana pasó muy rápido. Era sábado, y prácticamente no había dormido nada. Alex me había recordado a Aaron.

Flashback (1año antes)

- Cerrad vuestros libros y callaros. No podéis salir hasta que sea la hora.- estúpido profesor de matemáticas que no nos dejaba salir antes de hora. Después de unos cinco minutos que se nos hicieron eternos a todos, el timbre tocó haciéndonos salir corriendo por la puerta. Era viernes. A todos nos encantan los viernes. No?

Eso pensaba yo.

Salí del instituto y me encontré con mi mejor amiga, Mery. Hablamos un poco mientras nos alejábamos del instituto pero se me olvidó que tenía que hablar con la profesora de historia para nosequé de un trabajo para subir nota por que estaba apunto de suspender blablabla..

- Oye tengo que hablar con la profesora de historia. Nos vemos luego?- asintió y nos despedimos. Volví al edificio chocandome con alumnos sudorosos y gordos que siempre se quedaban los últimos.

En realidad no sé por qué sudan tanto, si salen los últimos no creo que hayan corrido mucho.

Bueno, entré al edificio y fui hacia la clase donde la profesora me esperaba. Pero oí unas risas en el pasillo de la izquierda. Me acerqué para escuchar mejor, reconocí esa voz así que me asomé viendo a Aaron con una chica.

NO. A AARON CON UNA CHICA NO.

A AARON BESÁNDOSE CON UNA CHICA.

Salí corriendo de allí oyendo los de mi 'novio' y cogí el bus para llegar a mi casa.

Estaba cerca, pero no me gusta andar.

Me metí en mi habitación a llorar pensando en que dentro de 14 días íbamos a cumplir un año de novios. Un año tirado a la mierda.

Fin del flashback

Escuché a mi madre y a mi tía llamándome. Pero las ganas de levantarme eran 0. Lo que de verdad me apetecía en ese momento era llorar.

A parte de matar a Aaron que estaría muy agradecido de que mis padres se hayan separado y que mi madre tenga una hermana viviendo a más de 200 km de donde vivíamos antes.

Mi madre estaba subiendo las escaleras y entré a mi aseo para limpiarme los ojos y ocultar las ojeras.

- Sara, baja que nos vamos a la cafetería a desayunar.- le contesté con un 'vale' que casi fue inaudible para sus oídos.

Sí, mi tía tenía una cafetería a medias con un chico que seguramente sería su pareja en estos momentos.

Me vestí con una sudadera y unas mallas y bajé. Iba por el ultimo escalón cuando escuche una voz masculina que yo no conocía. Giré para entrar por unas puertas de madera que llevaban al salón. Había un chico rubio hablando con mi madre y mi tía.

No os confundais. No era la 'pareja' de mi tía. Era un adolescente bastante adjuekslslfd.

Sí, esa es la palabra.

- Sara- la voz inconfundible de mi tía me despertó - este el Thomas, el hijo de Thomas- se me escapó una risa mientras mi tía me fulminaba con la mirada. Levanté los brazos en signo de rendición y me acerqué a él para darle dos besos.

Ya sé de donde venía el nombre del bar.

- Encantado- su voz era muuuy bonita.

- Thomas vendrá a vivir aquí.- dirigí mis ojos hacia ella y intenté decir algo pero se adelantó- antes de que hagas preguntas estúpidas como "¿cual de los dos Thomas?" o "¿por qué se quedan aquí a dormir si no hay sitio y ellos tienen una casa muy cerca de aquí" te lo explicamos todo en la cafetería.