Era mi primer día de escuela, todo empezó normal, excepto porque llegué tarde.
Una vez ingrese me di cuenta de que el colegio era pequeño, pero se sentía cálido de cierta forma. No había muchos salones, pero... ¿Cuál se supone que me corresponde?.
Para mi fortuna había una señorita que se percato de mi confusión. Y me ayudó a encontrarlo.
Bueno ahora, solo me queda pasar por uno de los tantos momentos incómodos, que todos tienen que pasar... Presentarse.
Aunque tal vez es distinto para las personas extrovertidas, como no soy una de esas no puedo confirmarlo.
La profesora me asignó mi asiento, que era junto a un compañero que tiempo después me dijo su nombre, Valentino.
Me agradó bastante, tal vez sea el inicio de una amistad.
Terminadas las clases salí con mis compañeras, en grupo, por orden de la profesora, bajando las escaleras me choque con un alumno, parecía de un grado superior.
Se quedó obsevandome por unos minutos, solo lo miré extrañada y me alejé. Aún podía sentir su intensa mirada...
Decidí dejarlo pasar por alto, simplemente seguí a aquellas niñas, luego del recreo por alguna razón no podía dejar de pensar en aquel extraño chico.
Intentando ignorarlo, terminé centrandome en la clase de Aritmética, no me gustaba ese curso, era demasiado complicado desde mi punto de vista.
Tanto así que me daban ganas de llorar de impotencia, porque no me salía ningún problema.
El profesor me termino ayudando, estaba un tanto apenada, pero me tocó aceptar que no iba poder sola.
En ese momento supe que iba a ser un año complicado.
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Esa Maldita Sonrisa
RomanceEsta historia está inspirada, en algo que me paso. Dudo que la llegue a publicar, pero si lo hago espero que la disfrutes y tal vez sea la única que haga. Aunque bueno no sé que se me pase por la cabeza en un futuro, muchas gracias por su atención.