Christopher recordaba haberse enamorado alguna vez cuando era más pequeño, tal vez no era más que una tontería de niños, pero el amaba a esa niña aunque nunca fue capaz de decirle nada. Comenzó a perseguir su sueño y se olvidó de eso por completo, se prometió guardar ese tipo de sentimientos, no podía, no debía. Al fin y al cabo tendría que sacrificar algo para cumplir su sueño.
Él pensaba que podría soportarlo, que no importaba sacrificar eso, hasta que conoció a Bi, hasta que la miro reírse por cosas sin sentido, hasta que vio sus ojos de emoción cuando conoció a los chicos, hasta que la vio dormir, hasta que la vio sonreír. Chan no sabía que le estaba pasando, pero no quería que terminara, si esa felicidad era momentánea quería que durara lo más posible.
Bibiana llevaba casi un mes sin ver a Chris, aunque hablaban por teléfono si esta podía o se mandaban uno o dos mensajes solo para saber que se encontraban bien, ella sabía que él estaba muy ocupado y lo entendía.
Cada semana, durante su día de descanso del trabajo, Bi iba al súper mercado a hacer sus compras. Había descubierto un lugar donde vendían especias a granel y algunos ingredientes extranjeros, era un poco más caro así que solo iba una vez al mes a comprar lo que necesitaba.
Su camino de regreso fue temprano por la tarde, tomó un taxi de regreso a su casa y este la dejó Justo frente a la puerta del edificio, tomó sus bolsas de la compra y bajó del auto agradeciendo al conductor.
-Hola, déjame ayudarte- dijo Chris quien estaba junto a la puerta.
-¿Que es haces aquí? Dijiste que estabas muy ocupado- dijo soltando un par de bolsas para que él las sujetara.
-No era mentira, pero hoy nos dieron unas horas libres y mañana volveremos a trabajar- dijo mientras caminaban al departamento de Bi.
-Deberías estar en casa descansando- le regaño.
-No pasa nada, te ayudaré a acomodar las compras- se ofreció.- No aceptaré un no por respuesta.
-Está bien- le dijo y le comenzó a indicar donde tenía que meter cada cosa.- Cocinare algo que comía en mi país, ¿quieres quedarte a comer?
-Si, aún no he comido nada-
-Christopher- le regaño.
-Mejor me hubiera quedado callado- susurró.
-Está bien, comerás aquí hoy- le sonrío.
Bibiana extrañaba la comida de su madre, muchas de las cosas que comía en Mexico no puedo comerlas en Corea, y muchos ingredientes no los encuentra ahí. Así que ese día optó por hacer algo sencillo con ingredientes básicos; tortitas de papa con sopa de arroz, se supone que debería llevar frijoles pero era demasiado difícil encontrarlos en las tiendas ahí, así que se rindió.
-¿Te ayudó a preparar la comida?- preguntó Chris viendo a Bi revolver el arroz en una hoya.
-Puedes ayudarme a hacer las tortitas- dijo caminando hasta la mesa donde ya tenía el plato con el puré de papa revuelto con huevo, sal y pimienta. Después le mostró a Chris cómo hacerlo y este le ayudó en lo que Bi ponía algunas en la sartén con un poco de aceite.- Aunque, ¿puedes comer esto? Lo estoy preparando con aceite y es más grasoso de lo normal.
-Está bien, nadie se enterará, además no estoy a dieta ahora mismo.- le aseguro.
Ambos se divirtieron cocinando y Bi comenzó a reproducir música en aleatorio en su celular para que no hubiera silencio entre ambos chicos concentrados. Cómo era obvio muchas de esas canciones eran de Stray Kids así que Chris sonreía con ternura al ver a Bi cantando algunas partes muy concentrada.
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Intriga [Bang Chan]
FanfictionBibiana es una chica común, no podrías diferenciarla de cualquier chica de 24 años por algo en particular. Una estudiante excelente de nacionalidad Mexicana que deseaba con todas sus fuerzas superarse; solo una fan más del K-pop. Una nueva oportunid...