CAPITULO 02: PROCESANDO

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Sion lo miró atentamente, confundida por cada componente de su comportamiento.

Solo había querido observarlo, ver qué era lo que quería cuando intervino con los Ejecutores. Aunque no había logrado agarrarlo con Etherlite, el campo límite que usaba para rodear su escondite había detectado su presencia. Al igual que el Fraga Enforcer que había sido enviado tras él, ella simplemente había realizado un seguimiento de los seguidores de la Iglesia y los había vigilado. La información en la que informaron la llevó a investigar por su cuenta y a hacer algunos cálculos sobre quién era esta persona fantasma y cuáles podrían ser sus motivos. Ella había determinado que, si en verdad se trataba del susurrado hijo de Emiya, el asesino de magos, recurriría a la ocultación mundana en lugar de a la magia. Al acechar al equivalente local de un albergue, apareció un joven que coincidía con la información que la Asociación tenía registrada.

Otros podrían llamarlo coincidencia, casualidad o suerte. Sion sabía que todo estaba dentro del ámbito de la probabilidad y manipulaba lo que podía para tener éxito.

Ella lo llevó a su propio nuevo escondite. Fue una especie de compromiso con la sensibilidad de un mago y la estrategia que esta Shirou Emiya había usado para evitar ser detectada. Era un dormitorio local para estudiantes de secundaria que tenía una vacante. Sion había manipulado los recuerdos del monitor para que pareciera que era una estudiante, lo que no era difícil ya que Sion apenas era mayor que los otros inquilinos. Luego se aseguró de extender su campo límite formado por Etherlite alrededor de las instalaciones con fines de detección.

Aunque el dormitorio era solo para chicas, Sion había observado a otras chicas traer novios de vez en cuando; si uno era discreto, generalmente se pasaba por alto. Shirou caminaba por sus propios medios cuando regresaron a la civilización y fue lo suficientemente ágil como para estar bastante callado cuando entraron al edificio. “Estoy bastante acostumbrado a actuar con normalidad mientras me muero a medias”, había dicho.

Como establecimiento temporal, la habitación estaba escasamente amueblada. Sion guardaba una cartera de posesiones y no había planeado reunir más recursos para esta ubicación. Así que se limitó a acomodar a un invitado, Shirou solo podía quitarle los zapatos y acostarse en la cama mientras ella aplicaba vendas a sus heridas.

Heridas que sangraron. Lesiones que ...

"Está bien", dijo Shirou. Tomó las tijeras cercanas y cortó el mechón que ella había estado dando vueltas alrededor de su torso. "Esto es suficiente." Aparentemente, confundió su vacilación con la preocupación de que estaba agotando todos sus suministros médicos. "Gracias."

Sion miró las tiras de tela mientras él aseguraba los extremos y alcanzaba su ropa. La sangre ya estaba empapando un par de heridas. Sabía que los demás también estaban sangrando, aunque internamente. "¿Estas seguro? Debe haber algo más que se pueda hacer para frenar el sangrado profuso ... "

“Eh, no realmente. Y en realidad he tenido peores, para ser honesto. Bazett se lo estaba poniendo fácil, a pesar de lo que dijo ".

"Me pareció que el Ejecutor no se estaba poniendo 'fácil' contigo".

Shirou volvió a ponerse su camisa sucia. “Probablemente no hayas conocido a Bazett antes, pero es mucho más amable de lo que se cree. De todos modos, podría decirlo. Hubo suficiente vacilación allí para que al menos pudiera rastrear lo que estaba haciendo. En una batalla real y completa, no creo que ese sería el caso ". Sonrió ante algún tipo de broma que solo él parecía entender. "Ella probablemente no me habría matado, simplemente me golpeó hasta el punto en que no iba a resistirme y llevarme de regreso".

Resonancia compartida de la experiencia de posesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora