El pilar de la serpiente, Obanai Iguro, jamás ha visto un arcoiris.─Es un arco luminoso que aparece en el cielo con la salida del sol después de la lluvia ─Le había explicado el pilar de la llama una vez─. Tiene todos los colores, ¡es maravilloso!
También había escuchado de otras personas que era algo hermoso de presenciar y que sus diversos colores deslumbraban.
Hizo intentos por vislumbrarlo, pero en todos falló. Cuando se quedaba esperando a que acabara la lluvia no pasaba nada y cuando sí pasaba él no estaba presente.
Frustrado, pensó en rendirse. No era como si su vida dependiera de si llegaba a ver un arcoiris o no; tal vez todos exageraban y en realidad no era la gran cosa.
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Mientras divagaba sobre cómo no era novedoso el hecho de que Kyojuro exagerara algo, un cuervo graznó desde las alturas y lo hizo alzar la cabeza para darse cuenta de que venía hacia él.
Le había llegado una carta.
Al reconocer tanto al cuervo como a la perfecta caligrafía de su chica soñada, su corazón retumbó locamente dentro de su pecho y su vientre comenzó a hormiguear por la emoción.
Para su suerte, el único testigo de sus irregularidades fue Kaburamaru, y él nunca lo delataría.
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─Entonces, Iguro, ¿nunca has visto un arcoiris? ─Tengen ya lo había escuchado cuando lo reveló hace unos segundos, pero quería corroborar.
─No ─Fue su simple contestación.
─¡Qué pena! ¡son fantásticos!
Estaba por refutar la declaración entusiasta de su compañero flameante, ¿qué tenía de fantástico una simple reacción natural?
Por lo que oía, solo eran algunos colores en el cielo y nada más, casi como una ilusión óptica.
─¡Aaah! ¡llego tarde! ¡disculpen!
El chillido de la oji-verde hizo que todos voltearan a verla; algunos la saludaron amigablemente, como Kyojuro; otros simplemente la recibieron con el debido respeto y distancia, como Sanemi; otros... observaban las nubes y comparaban sus diversas formas, completamente ignorantes de la llegada de su compañera (No hace falta nombrar).
Obanai, especialmente, la observó charlando con el pilar de la llama y el del sonido; no hubo lugar para sus habituales celos e inquietudes, solo había espacio en su mente para ella y para lo hermosa que se veía.
─¡Ah! ¡Iguro-san!
Apenas y pudo reaccionar cuando ella ya se estaba dirigiendo hacia él; Kyojuro y Tengen continuaron la conversación entre ellos, aunque juraría que el albino le dirigía algunas miradas furtivas (probablemente para estar al tanto del chisme).
─¡Es bueno verte! ¡¿te llegaron mis cartas?! ¡disculpa que me tarde en contestar a veces! estoy tan ocupada ─suspiró.
Obanai todavía la estaba observando con detalle.
─Kanroji... también estoy feliz de verte ─dijo antes que nada─, y no te preocupes, con que las respondas es suficiente.
La sonrisa que ella le regaló provocó otro desorden en sus sistemas. Es como si ella de pronto resplandeciera.
Al menos, ahora estaba seguro de una cosa: No necesitaba un arcoiris, cuando tenía a Mitsuri Kanroji, la encargada de poner color a su vida.
· ͟͟͞͞➳ Yessi (DYessiRA).
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*ೃ੭ ѕнe'ѕ α rαιɴвow °.❜
Fanfiction🌈 ❜──────────────────────── ᴇʟʟᴀ ᴛʀᴀᴇ ᴄᴏʟᴏʀ ᴀ ᴛᴏᴅᴏs ʟᴀᴅᴏs ᴇʟʟᴀ ᴘᴇɪɴᴀ sᴜ ᴄᴀʙᴇʟʟᴏ ᴇʟʟᴀ ᴇs ᴜɴ ᴀʀᴄᴏɪʀɪs ──────────────────────── A pesar de nunca haber presenciado un arcoiris, Obanai...