El se sentó frente a mi, lo que hacía más difícil contarle. Tenerlo frente a mi dolía mucho más, sabiendo que nunca sería mío.
Kim: Después de hablar contigo en el aeropuerto, estaba lastimada, no podía pensar demasiado claro, lo único que quería era salir de ese lugar e irme a casa y llorar toda la noche. Pero para cuando salí e iba a cruzar la carretera, alguien choco conmigo, eso hizo que me desorientara. No escuché al coche venir y paso lo que tenía que pasar *le explicó. Puedo ver cómo abre los ojos preocupado*.
Aunque su mirada reflejaba preocupación, todo su cuerpo estaba sereno, estaba como el Lei de siempre, el de hace dos años. Lo había extrañado, había extrañado su silencio. Me resultaba cómodo y reconfortante siempre. Incluso sus pequeños momentos en dónde se ponía ocurrente. Pero extrañaba verlo con los demás, con sus amigos. Porque se lo mucho que ellos lo extrañaban a el.
No siento celos de Alice, se ve a lo lejos que es una chica linda y que está enamorada de Lei. De hecho es todo lo contrario, estoy agradecida con ella por cuidar de él, por estar a su lado en sus momentos difíciles. No debió haber sido facil haberse ido creyendo que una amiga murió.
Kim: Como Shancai te contó; estuve en coma por un año y para cuando desperté, no tenía noción del tiempo. Por un momento creí que estarías ahí, pero el único que estaba ahí, tomando mi mano, era Mei Zuo. El estuvo conmigo todo ese año, nunca me dejó sola, incluso después de eso, el se encargó de todos mis cuidados y lo más importante, se quedó conmigo. El es un gran amigo, lo ha sido desde que lo conocí. Es por eso que él decidió sobre no decirte que había despertado del coma, pero Lei... *Lo veo con una mirada de disculpa* Nosotros no sabíamos que te fuiste y que viviste por dos años creyendo que morí aquel día. Lo lamento.
Lei: ¿Y por qué no me llamaste tu después?
Kim: Porque sabía que habías conocido a alguien, no quería reaparecer en tu vida después de un año. Cuando supe que nunca veniste a verme al hospital o ni siquiera llamaste para preguntar por mi, entendí que lo que dijiste aquel día era verdad. *Puedo notar una leve expresión de arrepentimiento, pero decido ignorarlo*. Lamento que hayas sufrido por mi culpa, por no conseguir antes la madurez para tomar un teléfono, llamarte y contarte todo.
Lei: No... Yo... Todo lo que dije aquel día, lo lamento.
Kim: Las cosas ya pasaron de esa manera Lei, no hay nada que disculpar, dejemos todo como estaba. Ahora tenemos una nueva oportunidad para volver a retomar nuestra amistad *le digo con una leve sonrisa*.
Lei: ¿Y si no podemos? *Lo veo con confusión* Nunca supe cómo ser simplemente tu amigo, me di cuenta de eso tarde, es por eso que me fui. Las únicas verdades de aquel día, son todo lo que tú mencionaste. Entonces ¿Y si no sabemos cómo ser solamente amigos?
Es más que obvio que yo tampoco sabré como ser solo su amiga, pero el tiene a alguien esperándolo, una chica ajena a todo lo que sucedió hace dos años, alguien que no merece salir lastimada solo por nuestra culpa. El encontró la felicidad con ella, van a casarse en algún momento, no quiero romperle eso, cuando no sabemos si funcionaremos juntos. No me perdonaría a mi misma si por mi culpa, Lei pierde su oportunidad de ser feliz.
Kim: Si no sabemos... *Lo veo dudosa, entre decirle que luchemos, que nos arriesguemos por lo que sentimos y entre simplemente dejarlo ir* Entonces ya encontraremos una manera.
No sé si tome la mejor decisión, tampoco se cuanto tiempo me tomara dejarlo ir, poder verlo con ella sin desear ser yo. Pero si lucho con toda mi fuerza de voluntad, se que lograre soltarlo.
Lei: *el asiente sin despegar la mirada del piso y me pregunta* Entonces, ¿Amigos?
Kim: Si, amigos *le confirmo con una media sonrisa*.
El me observa detenidamente, quizá buscando algún indicio de duda sobre lo que acabo de decir. Quizá el también espera que me arrepienta y le diga que lo que acabo de decir es una estupidez. Y siendo sincera, no se si sea tan fuerte, así que tengo que irme de una vez o nunca podré renunciar a Lei.
Kim: Tengo que irme Lei.
Lei: ¿Tan pronto? *Asiento* Está bien, déjame llevarte a casa.
Mei Zuo: No hace falta, la llevaré yo *dice de repente acercándose a nosotros* ¿Nos vamos? *me pregunta y yo asiento. Así que ambos nos alejamos del lugar*
Dejando así a un Lei con muchos pensamientos presentes, con muchas cosas en las que pensar, quizá confundido con lo que está pasando justo ahora. Me voy con Meizuo, pero mi corazón se queda ahí con Lei, frente a el, porque es de el. Ha sido de él desde el primer día que nos conocimos.
✨✨✨
Holaaaa, Holaaa ¿Cómo estamos después de este capítulo?
La verdad yo chillando, no se que pensar, cuéntenme que creen que pasará en los siguientes capítulos.
Les cuento que en esta historia no tenía pensado poner alguna canción, pero me encontré con esta y de verdad que siento que describe a la perfección la situación de mis dos niños.
Para que lloren con estilo y más ganas. Besitosss y esperen el próximo capítulo.
