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🍯 Oír y Apreciar

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🍯 Oír y Apreciar

- Por última vez Camilo no soy el novio de Mirabel. -habló con un tono molesto observando al chico que no parecía creer ninguna de sus palabras.

- ¿Estas seguro _____? -pregunto nuevamente pareciendo que las últimas catorce respuestas negativas no habían sido suficientes. - Es que si parces su novio.

- ¿Acaso de caíste cuando eras bebé o cuando apenas se estaba desarrollando tu cerebro? - estaba molestó y su paciecia en algún momento se terminaría acabando. - Por última vez ¡No soy el novio de tu prima!

- Te creo.

- ¡Eres un...! Agh ¿De qué me sirve enojarme? -dio una mordida a la arepa que le había dado una amable señora que parecía ser la mamá de Mirabel. -Esto sabe demasiado bien.

- ¿Verdad que mi tía Julieta sabe cocinar muy bien?

El de cabellos oscuros solo asintió dándole la razón al Madrigal, aún seguia preguntándose como había terminado hablando con Camilo como si fueran mejores amigos de toda la vida que después de tanto tiempo pudieron volver a reunirse, todo había sido demasiado rápido para su opinión en un abrir cerrar de ojos ya estaba en la parte trasera de la casa explicándole al adolescente que todo lo que habían dicho los niños fue un malentendido solo había ayudado a Mirabel para poder librarse de los niños pero no esperaba que todo lo que le pasó, aun así no podía quejarse Camilo resultó ser alguien agradable y divertido apesar de tener esa personalidad orgullosa era justo como _____ lo pensaba no podía juzgar a un libro por su portada y lo que le resultaba más interesante era que el Madrigal terminaba haciendo cosas diferentes a las que se esperaban era una caja de sorpresas.

Debía admitir que el ambiente que tenía "casita" era tranquilo al igual que acogedor no había algo que le molestara ignorando que aveces algunas cosas se movían sola y las personas no parecían estar incómodas con eso, tal vez pronto también el se acostumbraria a ver cualquier cosa moverse, se preguntaba así mismos si la casita también tenía sentimientos o algo así y es ____ desconocia por completo el lado mágico del pueblo de Encanto. Pero tampoco podía pasar por alto la presencia que mantenía la abuela sobre su familia y es que uno tenían que ser tonto para no ver como cada integrante de esa familia se forzaba así mismo por ser perfecto, para poder cumplir cada petición que hacían las personas del pueblo y eso era algo preocupante por que si se dejaba de lado los maravillosos dones y la magia de casita, se podía ver lo que se escondía detrás de esas sonrisas forzadas.

La curiosidad lo mataba por completo y es que quería saber cuál era la razón del rechazo hacia Mirabel por parte de la abuela Alma, sabía que la joven no tenía don, pero eso era justificación para tratarla de esa manera y es que ella solo parecía ser como la oveja negra de la familia que todos trataban de esconder. Antes de que fuera invitado a entrar para poder aclarar todo el malentendido pudo escuchar como un señor le daba un "regalo" a Mirabel por ser la única Madrigal sin don y lo repitió como dos veces, sintió lastima por esa chica al tener que pasar por eso solo por no tener algo que la hiciera especial al igual que su familia.
Se notaba que la de lentes hacia su mayor esfuerzo por querer ayudar en su casa pero solo era alejada o ignorada tanto por su familia y las personas del pueblo, no le haría mal hablar con ella un rato e intentar ser su amigo.

Tu Sonrisa  [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora