𝑚𝑖 𝑟𝑒𝑖𝑛𝑎 𝑠𝑎𝑛𝑧𝑢 𝑦 𝑡𝑢 [𝑦𝑎𝑛𝑑𝑒𝑟𝑒]

Parte Ⅰ

—me puedes dejar en paz? —hablé con molestia

—pero, mi reina— cuestionó mi acompañante

—nada de mi reina!! —le reclamé para caminar más rápido —que mierda hice para que no se me despegara —pensé

Mi amistad con aquel chico raro inició hace unos meses atrás... Para ser sinceros ni siquiera se como sucedió 

Caminaba con algunas bolsas de comida mientras iba para mi trabajo de medio tiempo

Mientras cruzaba la calle mire que cerca de mi, había un pequeño grupo de chicos molestando a alguien

No me gusta meterme en problemas, si podía los evitaba... Pero la verdad, es que hoy estaba un poco aburrida

—oigan... No creen que agarrar a alguien en grupo son de cobardes— hable mientras entraba hacia los sujetos

—ah?... Tu quién eres?— cuestióno uno de ellos

—no te metas en donde no te llamaron maldita— habló otro bastante irritado

—mejor ve a casa y juega con tus muñecas—dijo el otro con tono burlón

—oigan y si mejor jugamos con ella— propuso el primero para acercarse a mi

Antes de él chico me tocará le había dado una gran patada en la entrepierna haciendo que cayera de rodillas

—alguien más?— pregunte mirando al pequeño grupo

—maldita!!... Vas a ver!!—

—esto no va a quedar así!!—

—bien, como quieran— respondí

—oye... Despierta, sigues con vida?—

Le hable a la persona que habían golpeado para averiguar si estaba consciente y largarme de allí, se me hacía tarde para ir con la anciana...  Lamentablemente no fue así, estaba totalmente inconsciente

Observé a la persona, pensé que era una chica por su cabello largo pero al mirar bien vi que tenía la tercera pata

Era un hombre... Aunque era un chico lindo, apesar de tener puesto un cubrebocas cubriendo la mitad de su rostro

No lo niego al principio quería dejarlo allí tirado pero hubo algo en el que me dio pena ajena, así que como pude lo cargue no soy tan cruel bueno tal ves tantito

No supe dónde llevarlo, lo primero fue llevarlo a un hotel y dejarlo allí pero no me dejaron entrar los empleados por ser menores de edad

La segunda opción fue llevarlo donde trabajo y tirarlo por allí cerca, no tenía mucho tiempo ni muchas opciones así que lo hice, si lo sé, estoy loca por ayudar a un completo desconocido

Había algo en mi que me decía que lo ayudará y eso era raro, comúnmente no soy así

Estaba en la parte trasera del local donde luego trabajó medio tiempo o simplemente me quedo a dormir a veces, iba a dejarlo tirado por ahí pero mi plan fracaso cuando la puerta para entrar por detras de la tienda se abrió de golpe