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El entrenamiento acabó pronto, parecía que el tiempo había corrido rápido.
— Oh, vivimos en direcciones muy diferentes. — murmuró María con un puchero después de que su amiga le dijera el lugar de su casa.
La rubia sonrió mirando a los chicos dirigirse hacia los vestidores para prepararse.
— Pero se de alguien que podría acompañarte.

Mientras tanto, en los vestidores risas y gritos le llovían al chico de cabello gris.
— ¡La invocaste! ¡Es igual a lo que dijiste! Dijiste que no conocías a nadie así, Bokuto-san, eres un mentiroso.
— ¡No! Chicos, se los prometo que nunca la había visto en mi vida. Si la hubiera visto antes, ¡no me hubiera sorprendido tanto! — se defendió el chico.

Todos lo miraron sospechoso y después de unos segundos en silencio volvieron a reír todos en unísono.
— Aún así, ¡estamos felices de que la hayas encontrado! — dijo Konoha. — ¡ Ni se te ocurra dejarla ir!

Bokuto sonrió y asintió. Miró hacia su lado viendo a Akaashi parado en silencio con una pequeña sonrisa.
— Oh, ¿Estas pensando en ella? — le dijo su amigo intentando ser lo más callado que pudo... por lo que todos lo escucharon.

— ¡¿Qué!? ¿Akaashi pensando en alguien? — gritaron algunos en sinfonía, parecía que lo tenían practicado. — Es cierto, Akaashi no nos dijo cuál era su tipo.
Muchos asintieron ante eso y Akaashi suspiró sabiendo que no lo dejarían en paz.

— Mi tipo es que sea muy amable con los demás y divertida. — habló con una voz suave sonriendo levemente.

Muchos soltaron quejidos con su respuesta.
— ¡Esa no es una respuesta buena!
— Pero es la que tendrán.

Igual el no mentía, totalmente era su tipo, aunque le faltaron los detalles. Con diversión y nostalgia, recordó como fue la primera vez que se dio cuenta de que tenía un tipo.
De hecho, recordó la primera vez que se encontró a el mismo enamorado de alguien.

❥❥

Un Akaashi de segundo grado de secundaria, se encontraba con su grupo de amigos de entonces.
Ahora estaban hablando de chicas.
— ¿Cual es el tuyo, Akaashi? — preguntó un chico.

Akaashi lo miro sin ninguna expresión en su cara. — ¿El mío?
Los chicos de su alrededor asintieron emocionados.
— ¡Si! ¿Cual es tu tipo?

¿Su tipo? Nunca había pensado en eso. Realmente no era algo que le importara mucho. Le gustaba el voleibol, y era dedicado con sus materias, pero, ¿su tipo?

— Me gustan las chicas divertidas, con las que puedes hablar de todo lo que te gusta y te van a escuchar, pero a la vez ella también hablaría de todo lo que le gusta. El tipo de chica que se preocupa por todos antes que de ella misma, y por eso llora en silencio, pero con un abrazo sincero es fácil que te diga las cosas que tiene en su corazón. Que a veces no sabe lo que dice su corazón. Pero aún así siente demasiado. Tímida, extrovertida, graciosa, seria, enojona, divertida. — Entonces paró en seco y dejó de hablar.
No solo había hablado demasiado, eso no lo querían saber aún así. Pero mentalmente siguió.

No tan pequeña, ojos verdes, pelo ondulado, largo y dorado. Sonrisa bonita. Que siempre pasaba el tiempo con el.
Paulina.
Entonces el chico se puso rojo.

— ¡Eh! ¡Akaashi está teniendo pensamientos raros! — gritó uno de los chicos que tenía a su alrededor provocando la risa de todos los demás.

El chico no se inmutó con este comentario. Si estaba pensando en cosas raras. ¿Por que cuando le preguntaron eso, lo que había venido a su cabeza era su mejor amiga de toda la vida?
¿Su tipo? Era el tipo de chica con el que querías estar, ¿no? Pasar tiempo, hablar, tomarse de la mano, besarse.
Besarla.

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