|2|. Mañana nos vemos

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Camine por la ciudad rumbo al hotel más barato. No tenía tanto dinero, pero si lo suficiente para pagar una habitación por hoy y comprar una botella del vodka más barato. Llegué a una tienda de autoservicio, entre las botellas de alcohol vislumbre un envase azul; en letras blancas y cursivas podía leerse "Zaverich". Pedí esa botella y una cajetilla de cigarros Chesterfield, agregué tres sopas instantáneas. Algunas frituras y, por último, un jugo de naranja para poder mezclarlo con el alcohol.

Las ruedas de la maleta se arrastraban por la calle haciendo bastante ruido. Estaba al borde de tomar la oferta de Carolina sobre el hospedaje, cuando vislumbre un letrero que decía "Motel de la Plata" y más abajo podía leerse "Habitación sencilla: 8 horas por $480". Revisé cuánto dinero me quedaba en la tarjeta y me alcanzaba para pagar al menos 64 horas, sin embargo, me iría a más tardar mañana por la tarde a casa de mis padres.

Después tendría que conseguir un nuevo lugar de alquiler.

Tendría que comenzar de nuevo en esta ciudad que me había hecho pertenecer a ella, que me había hecho creer en que yo era alguien diferente. 

Una vez en la habitación me recosté en la cama y miré el techo. Estaba cansada, sabía que el llanto vendría en cualquier momento pero aún no me sentía lista para quebrarme, no estaba lista para afrontar absolutamente todo el desastre. Mis ojos se llenaron de lágrimas mientras el frío de la habitación me abrazaba, al igual que la soledad y todos mis demonios.

El silencio comenzó a abrumarme, tome el control para prender la televisión que se encontraba justo frente a la cama. Presione el botón de encendido y música se hizo presente entre aquellas 4 paredes color amarillo crema. 

Duermo con el cadenón bien puesto
Porque pienso en las noches que soñé su peso
Y porque el resto de cosas que importan se fueron contigo

Agarro la botella y la abro, caigo en cuenta de que no he comprado vasos. Podría ser estúpida y tomar de la boquilla de la botella, pero suficientes problemas he tenido con el alcohol en mi vida como para saber que eso sería un completo error. 

En la mesita de noche, justo a un lado de la ventana cubierta por una cortina (la cual no es más que una lona roja), se encuentra un teléfono, lo agarro y llamo a la recepción, la extensión es #45 según un papel de texto casi ilegible que está pegado en la pared.

Del otro lado de la línea escucho a un hombre de voz madura y ronca, decir—: Recepción, ¿Qué desea?

Tomo una bocanada de aire y mirando la cortina, digo—: ¿Tendrá algún vaso? 

—Claro, señorita. En seguida se lo llevo.

Cuelga el teléfono y algunos minutos más tarde alguien toca una pequeña puertita que se encuentra en la pared, justo a un lado de la puerta de entrada. Camino sobre el azulejo blanco hasta llegar al pequeño picaporte. Cuando logro abrir, me entrega el vaso. Ninguno de los dos nos vemos la cara y me alegra que nadie, ni siquiera un extraño, pueda ver cuan destrozada estoy. 

Brindo por las noches y lloro en las mañanas
Y escribo cosas buenas de algunas chicas malas
Sobre todo, cuando ya se han marchado
Guccis en el closet, cien mil en una noche
La vida que querías, los Lambos y los Porches
Y todo para que al final te hayas marcha'o (Ay)

Mis manos temblaron al ver el líquido transparente caer en el vaso de cristal. No puse tanto vodka en el, sin embargo si era una cantidad no muy bien proporcionada. Bebí la primer cuba de un sólo jalón y así le siguieron otras tres más. La sensación de mareo se apoderó de mi cuerpo y me reí. Mi risa fue seguida por un llanto, un llanto en el que sentía las lágrimas quemar mis ojos, un nudo apretaba mi garganta, era tan sofocante. Quería llorar, gritar y romper todo. 

Había tomado tantas malas decisiones en mi vida y el tener que afrontar las consecuencias era tan difícil. Sentada en la orilla de la cama, frente a la televisión, escuché mi teléfono sonar varias veces, lo había dejado del otro lado de la cama, muy cerca de la cabecera. Las lágrimas seguían corriendo por mi rostro, me estiré hasta alcanzar el celular y una vez en mi mano volvió a timbrar. En la pantalla podía leer el nombre de Carolina, decidí desviar la llamada y cuando hice eso, la notificaciones se hicieron visibles.

Caro 🐼: Mujer, ¿Dónde estás?  10:05 PM

Caro 🐼: Mitchell, contestaaaa  10:07 PM

Caro 🐼: Puta madre, tengo a tu novia/exnovia tocando la puerta de mi departamento  10:10 PM

Caro 🐼: Llevaré a Valentina a su casa. Hablen. No pueden estar involucrando a los demás en sus problemas  10:30 PM

Mi amor : Tal vez tome una decisión de manera imprudente, necesitamos hablar bien las cosas  9:53 PM

Mi amor : Mitchell, voy para casa de Caro, quiero hablar  10:00 PM

3 llamadas perdidas de Caro y Mi amor.

¡MALDITA SEA! 

Suspiré y aventé el teléfono a la cama. Mis ojos se cristalizaron y nuevamente sonó el celular. Era Caro. Apreté el teléfono en mis manos y conteste. 

—Hola— murmuré y tomé un trago de lo que quedaba en el vaso.

—¡A la mierda! Hasta que contestas. Estoy llevando a Valentina en un taxi hacia su departamento, está un poco tomada. ¿No le avisaste que no te quedarías conmigo?— la voz chillante de Caro sonaba en el altavoz por todo el cuarto. Parecía estar un poco alterada y no podía juzgarla por ello, la situación no era para menos.

—No creí que fuera algo importante. Discúlpame, te pagaré el taxi, juro que no se volverá a repetir— mi voz se quebró un poco al final, pero eso no impidió que preguntara—: ¿Cómo está?

—Aquí la pregunta es ¿Cómo y dónde estás tu?— Caro realmente estaba preocupada, me levante y camine hacia la ventana, tome la cortina con mi mano para hacerla a un lado y poder mirar a través del cristal.

—Estoy bien, no te preocupes-

—Mierdesilla mentirosa, te escuchas tomada— rió—. ¿En dónde estás?

—No puedo decirte, no quiero que la traigas. Necesito estar sola por lo menos por hoy. Mándame la cantidad que sea del taxi y yo te transf- un ruido extraño y dos voces se escucharon antes de que alguien comenzara a hablar ilegiblemente.

—Mitchell, necesito hablar contigo, ven a casa por favor— era Valentina, las palabras salían un poquito arrastradas pero parecía aún estar bien.

—Mañana nos vemos. 

Y colgué.  

Hace ya un tiempo, no somos lo de antes, los dos lo sabemos
Y aunque confiese que sin ti no puedo y que te echo de menos
Mejor no nos vemos (Vemos)

✨🌹✨

Buenas buenas gente bonita, espero que les guste está triste historia. Los TQM. Les estaré dejando las canciones que lleguen a aparecer en los capítulos cada que llegué a poner alguna letra en los capítulos.

💿📀💿

Canciones:
Párteme la cara- C. Tangana, Ed Maverick
Mejor no nos vemos- Rels B

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⏰ Última actualización: May 17, 2022 ⏰

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