Capitulo 18

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Le regreso la sonrisa a Samuel cuando entro en el gimnasio.

-¿Qué vamos a hacer primero?

En lugar de esperar que él respondiera. Seguí caminando a través del gimnasio. Afortunadamente mi voz no sonó tan molesta como realmente lo estoy. Aún me duele que él no se presentara.
Se para a un lado mío.

- Cardio, como siempre.

Esta vez soy yo quien lideriza el camino hacia las máquinas. Puedo hacer esto. Puedo hacer esto. Ni siquiera estoy segura de cuantas veces digo las palabras, tratando de hacerlas realidad. No es tan fácil como pensé que sería pretende que no me importa, que esperaba más de él y me dejó caer.
Soy yo quien pulsa los botones para poner en funcionamiento la caminadora hoy. Me sumerjo en un trote lento, sin esperar a ver lo que Samuel hará. De nuevo, él se monta en su propia máquina a mi lado. Trotamos en silencio por diez minutos y cuarenta y cinco segundos. Estúpido cronómetro.

- Se que estás molesta. Planeaba venir. Solo que algo se presentó.

¿Algo se presentó? ¿Algo se presentó? Los chicos apestan. Lo ignoré por dos minutos y diez segundos.

- ¿Algo se presentó? Se que tomaste mi número telefónico. Tenías mi dirección, podías haber usado mi número también.
- Lo se.

¿Él lo sabe? Ahora estoy incluso más molesta. Mis piernas aceleran y estoy trotando más rápido.

- Bueno, me alegra oír que lo sabes. Bastante malo fue que yo no valiera la llamada que tú sabías como hacer.

Parte de mí sabe que yo no debería estar haciendo un escándalo de esto. Él no me debe nada, pero no puedo evitarlo. De algún modo él me hacía esperar por algo y no lo comprendía.

- Era importante.- Su voz es suave, pero firme.
- ¿Oh? Y que era tan importante. Esperé por ti Entrenador.
- Mierda.- Detuvo la caminadora. - Quería estar ahí. Hemos trabajado para lograrlo y... Era importante.- dijo de nuevo, pero aún no me cuenta donde estuvo. De alguna manera, se que no lo hará.

Hemos trabajado para lograrlo. ¿Realmente yo esperaba que la carrera hubiera sido por algo más? Todavía molestaba.

- ¿Sabes que? No me importa. Solo vamos a terminar nuestro entrenamiento.

Detuve la máquina. Samuel se alejó y yo lo seguí. Seguimos a través de nuestra rutina. Abdominales, lo cual déjame decirte, es súper embarazoso. Hoy es el día de brazo así que me condujo por un grupo de ejercicios de brazo. Él solo habla para decirme cuantas repeticiones hacer o apurarme. Yo solo hablo cuando tengo que hacerlo, lo cual gracias a Dios no es a menudo.
En todo el tiempo no puedo dejar de pensar en sentarme en ese carro. Su no respuesta. La disculpa que nunca ofrece. O el hecho de que de algún modo, me permito creer que de verdad quería pasar tiempo conmigo cuando en realidad solo quería contribuir al entrenamiento. Todavía, sigo buscando una respuesta, o esperando que haya una.

- Buen trabajo hoy.

Samuel cruza sus brazos y se inclina contra el edificio. Esta es la primera vez que en realidad él sale conmigo del edificio.

- Gracias,- murmuro, sacando las llaves de mi bolso. Luego comienzo a alejarme.
- Oye,- él me llama y yo de forma idiota me detengo. - Lo siento.

Y entonces esto me golpea. No estoy segura de por que me doy cuenta ahora, pero creo que se por que no vino. Tímidamente, me volteo.

- Estabas con tu hermano, ¿verdad? Estabas ayudándolo con algo.

Si es verdad, no disculpa por que no llamó. En realidad no explica por que no me dijo solo la verdad, pero hace que la parte de no presentarse de alguna forma este bien.
Los ojos de Samuel no me dicen nada. Están muy abiertos y mirándome fijamente. No se ha movido. Ni siquiera estoy segura de que esté respirando en este momento.

- Está bien... quiero decir, si esa es la razón, está bien. Yo comprendo.

Finalmente se mueve, alejándose de la pared un poco.

- ¿Por qué? ¿Porque soy el chico con el hermano paralítico? ¿Eso me excusa de todo? -Samuel niega con su cabeza, su cabello castaño flotando suavemente en la ligera brisa. - Te veo la próxima vez, __(tn).

Dándose la vuelta, se encamina de regreso al edificio. No se de donde vino el valor, pero cuando la rabia hizo erupción en la superficie, la dejé salir.

- ¿Sabes que? ¡No está bien! Tienes razón. Incluso si estabas ayudando a tu hermano esto no te da el derecho a no llamar ni presentarte!

Él se voltea como si mis gritos lo sorprendieran. Me sorprenden a mí también. No espero por su respuesta. Me doy vuelta y me alejo.

* * *
- __(tn), despierta. Necesito tu ayuda.

La voz de mamá como la primera cosa en al mañana nunca es algo bueno. Nada me complacería más que dar la vuelta y pretender que aún estoy durmiendo, pero desde luego, eso no funcionaría con ella, ¿o lo haría? Tal vez con otra mamá, pero no con la mía.

- ¿Si?- Me siento y froto mis ojos.
-Tuvimos una cancelación y necesito tu ayuda con algunas cosas para que estén listas para el concurso.

Es incluso peor de lo que yo pensaba. ¿Es posible para mí quedarme acostada y hacerme la muerta?

- ¿No hay nadie más?
- No, no lo hay. Ese es el por que estoy aquí. No es como si te pida mucho, __(tn).

No, no es mucho en absoluto. Solo la perfección.

-Está bien, Estaré abajo en diez minutos. -Ella cerró la puerta, salí de la cama y me alisté.

El viaje en coche es prácticamente en silencio. Yo no se lo que estaba pensando, viajando con ella así. Me pregunto si está tan nerviosa como lo estoy. Yo porque no quiero ver a las reinas de belleza de mi secundaria y ella porque no quiere verme cerca de las chicas. Esto solo nos recordará a ambas lo que no tenemos.
Cuando llegamos allí, no pierdo tiempo encontrando una esquina tranquila para pintar. Es una sencilla pared de fondo que tengo que pintar de blanco. No es difícil, pero mamá me ha chequeado cuatro veces en una hora. No porque ella esté curiosa, sino porque duda de mí. Mientras pinto, Elizabeth y su equipo son demasiado geniales para preocuparse por mí.
Mamá y Bridgette están trabajando en alguna especie de programa. Ellas no me ofrecieron mucha información y yo no pregunté. Cuando termino de pintar me movilizo a cualquier otro trabajo extraño que ellas necesiten que haga. Sacar la iluminación, más accesorios y sillas del almacén.
Probablemente he estornudado un millón de veces a causa del polvo. ¿Me pregunto si alguien más aquí tiene alergias como yo?
Así como en mi entrenamiento con Samuel el otro día, mamá solo me habla cuando tiene que hacerlo. No es que debería. Yo se eso. Este es su elemento. Ella está organizando a la gente alrededor y planificando algo grande. Algo que hará a todos decir, "Vaya, miren lo que Paulette Conway hizo." Yo no encajo en la ecuación.
¿Y Elizabeth y su equipo? Ellas solo se mantienen alejadas de mí. Son demasiado geniales para querer algo que ver conmigo.
Finalmente, cuando ya he hecho todo en la lista de mamá, la busco, esperando que podamos irnos. Siguiendo el pasillo de la parte de atrás del escenario, me dirijo hacia las oficinas, deteniéndome cuando escucho mi nombre.

- ¿Qué hay con __(tn)? ¿Estaría interesada en tomar el lugar de Ella? Estoy segura que ustedes dos podrían arreglar algo juntas a tiempo, Paulette.

ENTRENADOR PERSONAL; Vegetta777 -ADAPTACIÓN-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora