[CANCELADA]✨Cronica de una bruja✨//Camilo Madrigal

14.Velas (parte 1)

Ya sea por desamor, otro compromiso e incluso infidelidad, el hechizo para olvidar un amor era uno de los más comunes y básicos, siendo que cada luna llena a la gran hacienda en la cima del pueblo con barrancos color rojo bermejo, llegaba por lo mínimo una persona por la puerta de servicio a rogar siempre entre lágrimas que le quitaran aquel mal tan terrible, por lo que así fue como se crío _____ Iguaran, creyendo que el amor era una plaga, un virus y una peste que nublaba los sentido y que todas las veces terminaba en llorarle a la luna llena observando dos velas atadas por un hilo rojo consumirse.

Fue natural aprender el hechizo para cuando más de una persona llegaba en esas noches de luna llena y ayudar a su nana; fue en una noche en la que se quedó toda la madrugada observando consumir hasta la cera que su nana notó el resentimiento a aquel sentimiento que suponía ser hermoso, fue ahí cuando la anciana le enseñaría el hechizo que le salvaría la vida.

"Pero esto me matará" dijo preocupada "¿acaso es que tengo que sufrir para encontrar el amor?"

"Tienes que caer para apreciarlo, actualmente tienes amor pero no lo notas y es hasta que lo pierdas que lo anhelaras" serena le tomo la barbilla y suavemente la hizo mirarla "algún día el amor te salvara"

Por lo que si,ahí se encontraba otra vez en la deteriorada sala de aquella casa deteriorada esperando a que la rubia más mayor se terminara de alistar para tener lo necesario.

"¿Segura que con unas simples velas voy a olvidar a Camilo?" Dijo flor poniéndose de nueva cuenta los guantes y el velo para salir a la plaza.

"Primero, no solo es la vela si no el proceso, la vela en cuestión solo es un medio de materializarlo en este plano y que con tus propias energías puedas visualizar el objetivo" dijo mientras salía de la casa, mirando su reloj de mano "y segundo ¿son necesarios los guantes y el velo"

"No entendí la mitad de lo que dijiste" dijo finalizando de arreglar el velo blanco que cubría toda su cara "y claramente son necesarios querida, una verdadera dama necesita su velo que representa pureza y guantes para alejar lo impuro"

____ quedó algunos segundos en silencio, no es que ella no comprendiera su mentalidad, de echo lo hacía perfectamente, la paso encerrada toda su vida en su ascienda en la cima de los barrancos de color rojo Bermejo, todo por la antigua tradición de solo presentar en sociedad a las mujeres a los 18 años, lo que provocó una serie de eventos desafortunados que causaron la muerte de casi todo el pueblo; y viendo que Flor se marcharía a un mundo que no conocía quería evitarle todo lo que ella tuvo que aprender arrastrada por el monte como un animal de carga.

"Lo que te quiero decir Flor" dijo interponiéndose en su camino "No es que este mal hacerlo, si no más bien que no en todo momento" la contraria alzó la ceja "yo también crecí encerrada, la diferencia es que tú bordaste y yo aprendí la lengua de los muertos, tú postura y yo herbologia, tú etiqueté y yo magia"

"Y el punto es..." recalcando con sarcasmo la redundancia del asunto.

"El punto es que al mundo a donde vas a ir te va a comer viva si sigues así"

"¿Disculpa?" Ofendida la calló antes de que hablara "y antes del chiste malo sobre que me personas ¿a que refieres?"

"Me refiero a que podría empezar a ser menos recatada, por que te digo una cosa que aprendí cuando..." recordó los echos y decido mejor no decirlo, lo que generó duda en la rubia " es que halla afuera huelen tu miedo y debilidad, si titubeas un segundo se acabó"

"¿Que sabrás tú de-"en ese momento Flor repcordo la forma en que ella había llegado, medio muerta, tanto así que hasta un velorio tuvo "perdón..."

"Esta bien Flor, no tienes por que, tampoco es que seamos amigas" dijo de manera pasito agresiva mientras se adelantaba sin espera que ella terminara de arreglar su velo y guantes.

Resignada la rubia apuró su paso y empezó a seguirla, resignada a seguir el paso rápido de la primera, que solo pudo alcanzarla hasta que se paró en el puesto del primer vendedor, el de velas.

"Buenas vecino ¿me regala dos velas rojas?" Tratando de ocultar su malhumor con su tono amable normal.

"Perdóneme señorita pero las rojas se me acabaron, las últimas 10 se las llevaron para la iglesia, quizás un próximo cargamento llegue dentro de un mes"

"!un mes¡" dijo llegando agitada y empapada de sudor por el velo y los guantes la rubia "no puedo esperar un mes ____"

"Gracias" dijo para voltear y tomar de la mano para llevarse de ahí a la sudorosa chica "Flor Maria calmate por favor" dijo sentadola en la fuente de la plaza " solo tendremos que robar algunas de la iglesia"

"!ROBAR A LA IGLESIA¡" dijo casi desmayándose.

Camilo estaba preocupado, no veía a _____, desde que la había dejado con flor.

Justo cuando estaba llegando con el recado que le dio la rubia, el chico fue echado de la iglesia por el mismo cura que desde hacía años lo miraba mal en las misas, que con regañadientes le recibió el recado de la sobrina.

Suspiro el de cabellos rizados mientras se servía la fruta picada que había preparado la tía Julieta para  todos.

"Wow, nunca había visto a Camilo tan triste al lado de un plato lleno de comida" la tan particular voz de Isabela apareció por la puerta que comunicaba el patio con la cocina.

"Está preocupado por lo que están haciendo Flor María y _____" la hermana de pelos rizados llegó con su niño en brazos para resolver la duda de su prima.

"¡Dolores!" Camilo alzó la voz, después de que las mismas y el pequeño niño se sentaran en la misma mesa prosiguió a explicar su estado "es solo que, tengo miedo a que Flor le diga cosas sobre mi"

"Bueno si algo te relaja" Dolores interrumpió "que sepas que ella ya sabe todo lo qué pasó"

"No pues muchas gracias" sarcásticamente dijo el de rulos.

"Bueno, al menos si ella cambia de opinión aquí estaré esperándola" dijo Isabela comiendo la papaya, ganándose la mirada de odio de su primo que día con día veía más claras las intenciones de Isabela con su amada.