Strange Sun [Larry Stylinson]

Capitulo 4 "I Want To Love You"

Louis se levantó sin saber si la sorpresa de que no se había despertado en ningún momento de la noche era buena o mala, había dormido como un bebe, sin pesadillas, sin lágrimas, sin nada que lo perturbara, excepto ver el cuerpo de Harry desparramado en un silloncito frente a su cama, sus pies colgaban, era demasiado grande, la pijama más grande que tenía apenas le quedaba, el tenue sol de mañana no se filtraba en su totalidad debido al pesado azul marino del que estaban pintadas las cortinas de su habitación, oyó el constante repiqueteo de la ventana y supo que estaba lloviendo todavía, un poco más fuerte que anoche, las calles deberían estar inundadas para ese momento, no se imaginaba si hubiera mandado al chico a la calle anoche. Harry tenía la boca entreabierta, abrió el cajón de la cómoda alado de él, ahí estaba todavía su celular, lo prendió tocándose la frente como si estuviera enfermo, vio que eran las ocho de la mañana, nunca se había levantado tan tarde, pareciera que Harry si al ver como roncaba tan plácidamente, hasta en sus sueños parecía estar feliz porque reía de vez en cuando, Louis solo había visto a dos personas dormir en su vida, a su madre cuando regreso una noche a casa, totalmente perdida, susurrándole cosas hermosas, quería asegurarse que no se iría, aunque por más que rogo ella no se quedó, se fue justo al amanecer, ¿tambien él se iría en cuanto despertara?

Se levantó de la cama lentamente, haciendo a un lado las cobijas blancas, suaves al contacto, se acercó sigilosamente al chico, paso sus manos por sobre su rostro para saber si estaba totalmente dormido, por suerte lo estaba, no había tenido oportunidad de tocar su rostro la otra vez, y se estaba muriendo de curiosidad desde esa vez, rozo con su mano sus rizos, su cabellera era muy larga, le llegaba hasta el cuello, aun así se veía muy masculino, rio un poco ante su pensamiento, toco su frente con delicadeza, paso a su ceño que se encontraba un poco fruncido, lo apretó y él se calmó volviendo a relajar su rostro, toco su nariz, era muy extraña, volvió a subir su recorrido para tocar sus parpados y sus pestañas, toco sus mejillas dibujando pequeños círculos sobre ellos para llegar a sus labios, rosados, se veían frescos y lindos, eran delgados, no tanto como los suyos pero lo suficiente para que el pudiera notarlos como algo hermoso, sintió la mano de Harry tomando su brazo de repente, el chico abrió los ojos lentamente para ver los suyos tambien

Entonces noto que Harry no estaba solo viendo sus ojos, si no que estaba observando detenidamente a través de ellos

Se avergonzó ante su nuevo descubrimiento y bajo la mirada, el chico tomo su mentón haciendo que lo viera nuevamente

-Solo permítame mirarlo un poco más-.dijo Harry rompiendo su propio silencio con su ronca y excitante voz de mañana

Louis trago saliva pero no se movió de donde estaba, se disponía a cumplirle un deseo al ojiverde, se miraron como prometió y el tambien probo a mirar más adentro en los ojos de Harry, ahí donde tenía su alma escondida, no era un experto en descifrar como eran las personas en su interior, pero Harry pareció un libro abierto, veía a la perfección su felicidad, el sufrimiento, tenía una soledad tal vez más grande que la de él, solo que la suya no había sido voluntaria. Louis se acercó más a Harry, a lo que este abrió los ojos sorprendido, los motivos del ojiazul no podían ser relevados, quería besarle, en vez de eso se acercó un poco más para dirigir la nariz a su cuello y aspirar el olor de la lluvia que había quedado impregnado en Harry, confundiéndose de repente con su delicioso perfume

-Hueles a lluvia-.dijo Louis separándose del cuello del chico, este lo jalo del brazo para que no se alejara tanto

-Eso es normal después de haber pasado media hora probando la lluvia-.respondió el ojiverde burlándose de su propia situación

Louis no se había puesto a pensar en el tiempo que había estado Harry afuera de su casa, pudo abrir su boca un poco más, mostrando, no una sonrisa en su plenitud, si no su arduo camino hacia una verdadera, que sentía venia en camino