Capítulo 3 - Ropa negra

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Maddie Williams

Hacia mucho tiempo que no tenia esta sensación. Me siento como en casa y no quiero que ese sentimiento desaparezca como hace 11 años atrás. No puedo evitar abrazarlo cada vez mas fuerte, no quiero que se separe de mi. Ya lo perdí una vez y no volveré a dejar que eso esté a la orden del día.

-Princesa, no puedo respirar. -Dice casi sin aire en sus pulmones. En ese instante aflojo un poco mi agarre sin soltarlo del todo. Siento como hace caricias en mi pelo con su mano. -Yo también te he echado mucho de menos.

Minutos después me separo de el y lo miro fijamente a los ojos. Intento escanear su rostro para no poder olvidarlo nunca mas. Después de irme de Virginia estuve muchos meses sin relacionarme con nadie, solo quería a mi mejor amigo a mi lado, pero no lo tenia. Cuando crecí comencé a culparlo por no buscarme, pensé que si me quería tanto como siempre me había dicho me buscaría y estaría a mi lado. Al cumplir los 15 tuve una charla con mi hermano donde me explico la verdad. En todos esos años Mason no había pasado de preguntarle a su padre por mi, ellos nunca le decían nada porque sabían que vendría a buscarme sin importarle nada. En ese mismo instante entendí que debíamos dejarlo vivir su vida y que si realmente estábamos destinados nos volveríamos a juntar en algún momento de nuestras vidas.

-No me puedo creer que estés aquí, que te tenga por fin conmigo. -Mientras digo esto se me escapan algunas lagrimas. El al verme llorar acuna sus manos en mi cara y me limpiamente delicadamente las gotas saladas de agua con sus dedos.

-Venga, no llores mas princesa ya estoy a tu lado y no me voy a ir nunca mas. -Al decir eso no puedo evitar que me salga una gran sonrisa y pare de llorar. -Necesitamos hablar sobre lo que ha pasado todos estos años, vamos a alguna cafetería, yo invito.

Cuando me dice eso asiento pero entonces recuerdo el tour al que estamos obligados a asistir.

-Hay un problema, debemos volver al tour con los demás, es obligatorio.

-No hay problema, recuerda que han pasado lista al principio así que podemos irnos y no se darían cuenta.

-Vale, me has convencido. Vamos.

Mason y yo salimos de la universidad en busca de alguna cafetería donde charlar y pasar la tarde. Al cabo de 10 minutos encontramos una y entramos. Al llegar nos toman la orden y aprovechamos para sentarnos en una mesa.

-¿Cómo ha estado todos estos años? -Me pregunta el con curiosidad.

-Pues la verdad es que después de mudarnos a Nueva York, mi hermano y yo nos fuimos a vivir con mis tíos. Fue un gran cambio. Al principio lo pase realmente mal pero cuando pasaron los años el dolor se hizo mas llevadero. -Concurso con sinceridad. Pude ver una mueca en la cara de Mason, como si se sintiera culpable de alguna forma cuando en realidad el no tenia la culpa de nada. -No pongas esa cara, ahora que estamos juntos de nuevo estoy bien.

El solo me dedico una sonrisa y se quedo mirándome atentamente. De un momento a otro apareció el camarero y nos asignó lo que habíamos pedido. Estuvimos la mayor parte de la tarde hablando, riéndonos y recuperando el tiempo perdido. Cuando se hicieron las 20:00h de la noche quisieron volver a la universidad y pasar por el comedor para cenar juntos. Yo me volví a mi habitación a cambiarme la sudadera ya que me la había manchado de café. Al entrar al cuarto me encuentro con Sasha sentada en la cama con el móvil. Cuando la veo me acuerdo de que no le había avisado de que pasaría la tarde fuera. Ella al darse cuenta de que me entró mira y pone cara de enfadada.

-Lo siento Sasha se me había olvidado avisarte. Enserio lo siento mucho, pero he visto a una persona que hacia muchos años que no vio y es muy importante para mi. De echo se quedó con el para cenar en la cafetería, ¿quieres venir con nosotros?

-No pasa nada Maddie, podemos hacer la tarde de películas otro día. -Yo asiento en modo de respuesta y ella continua hablando. -Prefiero quedarme en la habitación, no tengo mucha hambre pero si quieres y es tan importante para ti me lo puedes presentar otro día.

-Claro no te preocupes mañana te lo presento. -Ella responde con un leve "vale" y sigue con su móvil. -Voy a cambiarme de sudadera y me voy. -Le informo.

Después del recorrido que tengo que hacer hasta llegar a la cafetería por fin veo a Mason esperándome en un banco al lado de la puerta. Me acerco a el desde atrás y le tapo los ojos con mis manos.

-¿Quien soy? -Le pregunto intentando modificar un poco mi voz para que no me reconozca pero es un intento fallido ya que no tarda ni un segundo en responder.

-Umm, deja que pienses. ¿Podría ser la mejor amiga del mundo mundial? O es la chica mas guapa del mundo entero? -Pregunta siguiéndome el rollo.

Lentamente le destapo los ojos y me pongo delante de el.

-Pues obviamente soy esas dos personas. -Digo haciéndome la tierra.

El se levanta del banco y me coge entre sus brazos, abrazándome y dándome un beso en la cabeza.

-Pues claro que lo eres princesa. Venga vamos a la cafetería que tengo hambre.

Entramos los dos juntos hablando y riéndonos, el con su brazo alrededor de mi cuello y yo con el mío cogido a su cintura. Estamos dirigiéndonos a una de las mesas cuando siento que me caigo al suelo. Al levantar la mirada veo al chico mas guapo que he visto en mi vida. Pelo moreno, ojos verdes esmeralda, rasgos con muy marcados sobre toda la mandíbula, vestido con una sudadera negra, pantalones negros y una chaqueta de cuero también negra. Se podría decir que a este chico le gusta mucho el negro.

Almas AtormentadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora