𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 | 𝐓𝐎𝐊𝐘𝐎 𝐑𝐄𝐕𝐄𝐍𝐆𝐄𝐑𝐒 𝐱 𝐎𝐂 |

𝗧𝗔𝗥𝗗𝗘 𝗗𝗘 𝗘𝗦𝗧𝗨𝗗𝗜𝗢 +18

Los personajes son mayores de edad, ¿okis?

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10:30 am. Las clases comenzaron hace unas horas y la cantidad de tarea que han dejado es demasiada si la comparamos con la que dejaban en la escuela secundaria. Pero claro, nadie dijo que la universidad sería fácil.

Miré con detenimiento la pizarra delante de mí, escuchando con atención lo que el profesor explica. Anoté todo lo que comentaba acerca del tema, cosa que usualmente no hago, pero los exámenes se acercan y el de química es el más difícil.

Quité mi vista del pizarrón para buscar a Baji y Fuyu, ambos sentados unas cuantas mesas más atrás, totalmente confundidos ya que no entendían el tema. Tanto el pelinegro como el rubio sintieron mi mirada sobre ellos, devolviéndomela al instante y sonriendo con pena.

Dieron las doce y la clase al fin terminó. Sucesivamente las clases fueron pasando, tanto que de un momento a otro la jornada escolar había terminado. Tomé mis útiles para meterlos en la mochila y una vez lista caminé hacia la salida del salón, donde me esperaban los dos chicos y así partiendo de una vez por todas a nuestros hogares.

— Creo que reprobaré la materia. — replicó Baji detrás nuestro, cabizbajo.

Chifuyu y yo nos miramos no tan extrañados por la actitud del pelinegro, es de esperar que dijera algo como eso porque nunca pone atención en clase y se la pasa molestando a los demás.

Por eso me siento lejos de ellos.

— Baji, ¿pero qué cosas dices? Claro que vamos a reprobar. — intentó animal el rubio, pero la cosa le salió al revés, ganándose un golpe por tremenda estupidez. — Digo, ¡si vamos a pasar! Sí, sí, eso haremos.

Lo miré amenazadoramente con tal de que no diga otra tontería. Me puse en medio de los dos, pasando mis brazos sobre sus hombros con tal de abrazarlos.

— No se desanimen, chicos. Haremos lo posible por pasar la materia. — traté de animarlos.

— Eso lo dices porque eres de las más inteligentes de la clase, Keiko. — contradijo Chifuyu, tanto para sí mismo como para nosotros.

Por más que trato de ayudarlos ellos no cooperan. Siempre que nos reunimos para estudiar terminamos haciendo otras cosas, como leer manga o salir a comprar Yakisoba, o cosas por el estilo. Aún así debo intentarlo una última vez, chicos de cursos superiores dicen que química es la materia más difícil de la escuela y sobre todo que el profesor es demasiado estricto al evaluar, cosa que es cierta.

— Les propongo un trato. — al instante atraje la atención de esos dos. — Pero deben prometerme que seguirán el plan al pie de la letra.

— Depende. — contestaron al unísono.

— ¿Depende de qué?

— De la oferta final. — estos idiotas, ¿quiénes se creen?

Apreté los puños por la molestia, nunca se toman las cosas en serio.

— Los odio, a ambos. — señalé, alejándome de ellos para caminar hacia el metro. Miles de insultos pasaban por mi mente, todavía que quiero ayudarles se atreven a poner sus condiciones. Idiotas.

Megumi, ¿por qué me dejaste sola con este par? Aunque bueno, tú estas con Draken y Mikey, así que mis condolencias por soportar a Manjiro. Creo que es más sencillo lidiar con esos rubios que con estos dos tontos.

Escuché dos pares de pies correr hacia donde estoy, al igual que sus gritos por lanzarse hacia mí, pero fui más rápida que ellos ya que logré apartarme antes de que cayeran encima de mí. El estruendo que hicieron sus cuerpos al chocar con el suelo fue fuerte, llamando de esa forma la atención de los demás. Aparenté que no los conocía y seguía con mi camino, escuchando cada uno de los quejidos y maldiciones que soltaban, ¿pero quién los manda a que se lancen de esa forma?