El amor suele llegar cuando menos
te lo esperas, ¿no crees?
Aparece cuando no quieres tener
conexión con alguien.
Pero cuando se hace presente,
te imaginas bailando la
canción indicada con tu persona favorita.
Esa canción tendrá un poco de ambos.
Quizás describa la personalidad
de uno, y del otro
definirá sus sentimientos.
La canción nos buscará,
y cuando llegue a nosotros;
descubriremos que es la correcta,
porque sentiremos que acariciará
a nuestras almas,
Y al mismo tiempo unirá
a nuestros corazones.
Hasta ese momento sabré
que los deseos se hacen reales.
Ahora, querido extraño,
dejemos que el viento dirija
nuestro camino. Seamos
esa historia que comienza
un catorce de febrero.
Permíteme escribirte hasta
que mi tinta se agote.
Déjame escribir todo aquello
que me inspire de ti.
Prometo que mis letras
serán tuyas y serán para
robarte suspiros.
Tu amor me está cambiando,
aunque aún no te conozca,
y a pesar de que aún no
empiece nuestra historia.
Tú eres ese hilo rojo, lo siento.
Hay algo que me lleva a ti.
Dime,
¿te atreves a ser parte de un poema que inicie el catorce de febrero?
