Capítulo 11: Subiendo de nivel.

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Cuando abrí mis ojos, mi cuerpo se sintió pesado y muy cansado. No tenía la fuerza de ni siquiera poder mover mi cabeza un poco, solo mis ojos. Debido a eso, miré todo lo que había en mi campo de visión.

Por el rabillo vi la silueta de una persona, de repente una mano se acercó a mi cara y me tapó los ojos.

"Duerme"

Una voz, que no conocía pero dentro de mí sentía que la había escuchado, de mujer me ordenó dormir.

Mis párpados se pusieron pesados y caí dormido.

Caí dormido.

XXX

Un espacio sin nada.

"¿Mismo sueño?" me pregunté en voz alta.

"¿Hmm?"

Una voz algo infantil y conocida se escuchó detrás de mí.

Antes de girarme pregunté.

"¿Gaia?"

"Sí, ¿quién eres?"

Giré sobre mis talones y frente a mí se encontraba Gaia que emitía un aura de inocencia y un profundo deseo de protegerla.

Ella tenía su ceño fruncido pero cuando miró mi cara puso una sonrisa en su rostro.

"Aunque esto es un sueño, nos volvemos a encontrar" dije.

Gaia negó con su cabeza.

"No, no es así. La vez anterior si fue un sueño con una parte de mí manifestándose en tu conciencia. Pero ahora, tu conciencia viajó a mi reino divino y se encontró conmigo, una diosa" dijo Gaia.

Puse una de mis manos en mi barbilla y empecé a pensar.

Frente a mí, había una niña que dice ser una diosa. Claro bien podía ser un juego de niños pero recordando las palabras de Sofía 'Alguna vez te encontrarás con dioses de diferentes formas y tamaños. Tal como algunas personas, en este momento están diciendo haber tenido un sueño y encontrarse con ellos una vez'. En esos días soñé con conocer un dios del fuego pero no le puse demasiada atención.

"Entonces... ¿los dioses si existen?"

Gaia asintió.

"En este momento hay varios dioses, en el pasado también los hubieron, griegos, sumerios, indios, egipcios y otras civilizaciones más originaron a sus dioses con una religión pura. Y, como en el pasado hubo, en el presente también. La Doncella Santa Sheila Kafka, es algo así como un oráculo de las 6 diosas y la reina Medeia Fullheart es la oráculo de la diosa de la tierra, ósea yo"

"Bien. Sabiendo que no estoy en el mundo que yo conocía, tal vez tener dioses sea algo normal"

"Vaya, aceptas las cosas con facilidad"

"Desde que desperté de la criogenización, todo el mundo, el ambiente, las personas, todo cambió. La magia, que desafía la realidad y se consideraba algo absurdo ahora es real y se ve en todas partes. Partiendo de este hecho, es común, al menos en mi caso, aceptar las cosas que uno considerara irreal y prepararse para futuros objetos, gente, razas y cambios que uno podría considerar irreales" dije.

Dándome cuenta de que estaba enfrente de un verdadero dios, me arrodillé y bajé mi cabeza.

"Pido humildemente acepte disculpas por mi insolencia" dije.

Sentí que me tocaron el hombro.

"Alza la cabeza. No has cometido ninguna insolencia, tú eres al que el mundo escogió"

El surgimiento de un guardiánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora