Se proclaman nuevas leyes, para aceptar a los híbridos en la sociedad, después de todo, estamos en el mismo mundo. Pero aún permanecen áreas prohibidas donde se permite la caza y esclavización de los híbridos, y se niegan rotundamente a quitarlas, ¿...
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Una pequeña híbrida estaba aferrada al pecho de MoonJo, sollozaba de vez en cuando, el suéter que llevaba era demasiado grande para ella, pero podía abrigarla, JongWoo contaba lo sucedido a los policías.
Luego de eso miró como MoonJo parecía hablar con la pequeña, estaba seguro de que la niña no pasaba de los 6 años. El hombre llevaba un largo antecedente de agresiones sexuales, se acercó a ambos híbridos, escuchando su conversación.
- ¿Se fue el hombre malo? - Oyó la temblorosa voz de la pequeña.
MoonJo asintió.
- Las personas buenas castigaran a ese hombre malo, le darán una buena lección.
La pequeña frotó su cabecita contra el pecho de MoonJo, el híbrido notó la presencia de JongWoo.
- ¿Qué harán con ella? - Preguntó MoonJo.
- La llevarán a un hospital primero... Luego a un orfanato...
MoonJo acarició la cabeza de la pequeña híbrida.
- Pronto tendrás una familia que va a amarte mucho, pequeña.
La mejor sollozó.
- Él mató a su mamá... - Murmuró MoonJo.
JongWoo suspiró, estaba cansado de esas personas, ¿cuál era la necesidad de hacerles daño? Casi sentía ganas de llorar. La menor tenía moretones en todo su pequeño cuerpecito, era sólo una niña, ¿la gente no podía ver eso? ¿Realmente no les importaba?
- Vas a estar bien, pequeña... - JongWoo trató de acariciarla pero recibió un arañazo.
- ¡No! - Gritó o más bien chilló, ocultándose en los brazos de MoonJo - ¡Humanos malos!
JongWoo tragó saliva, o más bien sus lágrimas, su mano goteo algo de sangre, MoonJo lo miró con preocupación.
- Oye... él es bueno.... - MoonJo miró a la niña.
- No... - Sollozó.
- Si, él me salvó a mí.... y también a ti, nos trajo a un lugar seguro...
La pequeña sollozó.
- Me da miedo...
MoonJo besó su cabecita.
- Existen muchos humanos buenos.... Mi JongWoo es un ángel... y le hiciste daño.... me duele que lo lastimen.
La pequeña alzó su mirada.
- ¿Te duele?
MoonJo asintió.
- Lo amo mucho...
JongWoo se le quedó mirando, la pequeña se volteó a verlo con un pequeño puchero.
- Perdón...
JongWoo sonrió, algo desanimado.
- Está bien... estoy bien... - Dijo casi susurrando.
