"Adios, Amor"

Úɴɪᴄᴏ.

A medida que me acercaba más a el doctor y a los enfermeros, podía escuchar sus susurros, traté de ignorarlos pero... Es imposible.

- Su corazón no da para más...

- Necesitamos un trasplante urgente...

- Estamos tratando de encontrar uno compatible pero... - Negó suavemente.

- No va a sobrevivir....

- Cómo está?! - Sentía mi cuerpo temblar, pero no era por la pequeña maratón que había corrido, era por él, porque iba a irse y no podía hacer nada para evitarlo. - Por favor dígame que-

- Lo sentimos Joven Bang, no logramos encontrar un trasplante.

Sentí que mi mundo se estaba haciendo pedazos, no podía ser cierto.

Mi mente se puso en blanco y sentí como mi cuerpo dejaba de funcionar.

Iba a morir.

Felix iba a morir.

Si tan solo me hubiese dado cuenta antes de todo lo que sufría, de sus problemas, de las ganas que tenía de acabar con su vida... Tal vez... Solo tal vez... Hubiese podido evitarlo...

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- Joven Bang? Puede escucharme? 

- Está abriendo sus ojos de nuevo, Doctor.

- Joven Bang?

- Ugh... - Mi cuerpo dolía demasiado como si lo hubiesen golpeado varias veces.

- Joven Bang? Recuerda por qué está aquí? 

- Felix - Y me senté de golpe, traté de levantarme pero el doctor me lo impidió.

- Comportándose así no va a arreglar nada, por favor recuéstese de nuevo. - Trató de recostarme

- No - Me alejé, de que manera se supone que debía comportarme entonces? Debería estar tranquilo? Feliz? O simplemente aceptar su muerte y ya? 

- Doctor... - Dudé un segundo, realmente quería hacer esto? Realmente lo dejaría todo? Por Felix?

La respuesta fue afirmativa.

-  Puedo darle mi corazón a Felix? 

Los presentes abrieron sus ojos con sorpresa.

- Joven Bang,,, qué est-?

- Cree que seamos compatibles?

- Espere un segundo. - Dijo y después calló por un par de segundos. - Acaso usted...?

Asentí seguro de mis palabras. Por Felix daría todo, incluso mi vida.

- Pero... - Comenzó la enfermera y terminó al parecer, porque parecía incapaz de pronunciar otra palabra.

- Alice... a-averigua si el joven...

- Entendido doctor Shin - Se acercó a mi, sacó un poco de sangre y salió de la habitación.

La habitación se sumergió en un repentino silencio, solo podía escucharse los pitidos de la máquina a la que estaba conectado y los pequeños sonidos de afuera.

El doctor parecía un poco preocupado, parecía querer preguntarme o decirme algo, así que esperé a que tuviera el suficiente coraje como para decirlo.

- Mi nombre es Shin Renjun, he sido doctor por 15 años, pero... - Se giró y me miró de una manera que no pude interpretar. - Nunca conocí a alguien como tú, Bang Chan. - Se sentó al parecer incapaz de seguir de pie - Así que... Puedo saber como lo conociste?