Te quiero a ti

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Mar

En menos de media hora Samuel ya no estaba en mis pensamientos, sino frente a mi bailando The Night We Met, se acercaba a mi oreja tatareandome la letra de la canción, cada vez que lo hacía se me erizaba todo el cuerpo, me dejé llevar, no pensaba en nada, a parte, necesitaba volver a estar en sus brazos.

Joder Samuel...

Cuanto más pasaba el tiempo, más me daba cuenta, de que no era casualidad que coincidieramos en la terraza, ni mucho menos el estar bailando uno pegado al otro, la canción llegó a su última estrofa y se acabó, nos miramos, y cai, "mi cartera, joder" pensé buscandola, aunque fue un poco tarde, porque era obvio que me la habian robado.

—Samuel, m-me han robado la cartera... —Dije muy asustada

—¿Es esta? —me dijo dándomela

—Si, muchas gracias

La ha encontrado...

Sonreí inconscientemente cuando sus yemas de los dedos tocaron las mías al darme la cartera, enseguida empezaron a venirme recuerdos del campamento, así que sacudí la cabeza.

La levanté y él seguía estando todavía  frente a mí mirándome, "se habrá quedado embobado, ¿no?" pensé mientras sus ojos estaban clavados a los míos.

—¿Quieres algo Samuel? —Le solté

—Te quiero a ti

La hostia...

Se me acercó y me beso la mejilla, después vi como desaparecía entre la multitud de gente, Dennise y Adrien hicieron que aterrizase en la tierra.

—¿Se puede saber qué cojones ha pasado?

No podía contestarle, no me salía ni el habla, estaba... Estaba en shock qué coño...

Te quiero a ti, te quiero a ti

Me había dicho que me quería a mi, madre de Dios Santísima, dos años después y mis sentimientos seguían a flor de piel como el primer día...

—¿Mar? —Me dijo Adrien zarandeandome

—Eh, si, si dime...

—¿Qué ha pasado?

—Y-yo, eh, eh...

—Anda vámonos, se ha hecho tarde... —Dijo Dennise cogiéndome de la mano

Salimos fuera y fuimos hacia el coche, yo seguía procesando todo lo que había pasado con Samuel.

—¿Adrien me dejas a mi primero en casa?

—Claro Mar...

Me sonrió a través del espejo retrovisor y arrancó el coche, el camino hacia casa fue mejor de lo que me esperaba para sernos sinceros, pusimos música de ambiente y hablamos del evento, menos del tema Samuel...

—¿Os subís a tomar lo último de la noche y os lo cuento?

—SI. —Dijo Dennise nada más acabe de pronunciar la última palabra 

—Con pelos y señales. —Dijo esta vez Adrien

—Con pelos y señales —repetí

Adrien no tardó en encontrar sitio para aparcar su coche, hacía un frío de mil demonios, y me maldecí por no cogerme una chaqueta, una vez llegamos subimos a mi apartamento, aunque lo primero que hice fue quitarme los tacones, que puñetero dolor tenía en los pies.

—¿Qué queréis tomar, chicos?

—Yo quiero un café...

—¿Por la noche? —Le contestó Adrien arqueando las cejas.

Algo más que un amor de verano [#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora