𝚁𝚘𝚖𝚙𝚛𝚎 𝚊𝚟𝚎𝚌 𝚝𝚊 𝚌𝚘𝚙𝚒𝚗𝚎

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Harry está aburrido, jodidamente aburrido.
Se encuentra en la fiesta de su tía, sí; la tía que no deja de preguntarle cuando presentará una novia a la familia.
Quiere que algo divertido entre por aquella puerta, lo que sea. Pide a la luna que sea rápido, ya que su boca comenzará a lanzar comentarios arrogantes hacia su familia.

Y tal vez no debió pedir "lo que sea" , ya que un apuesto hombrecito está entrando. Le ve entrar por aquella puerta, con su sonrisa brillante, sus ojos le hipnotizan, sus leggins están apretados, su glúteos se marcan y su boca se hace agua, le mira y le deja desconcertado.

Y, joder, ese hombrecito está tan prohibido, ya que ninguno de los dos están listos para salir del closet. Y menos, si aquel que acaba de llegar está en una relación con su prima.

Y joder, Harry no está  acostumbrado a sentirse así, el calor se va apropiando de su cuerpo y su garganta se ha secado cuando él se acerca a saludarle, su aroma masculino lo lleva al mismo paraíso y ahí puede pecar con mucho gusto.

"Hola, Harry." Saluda, acercándose más, haciendo que todo aquel exquisito calor se vaya alojando a su ingle. Su aroma le está volviendo loco y su boca seca no está ayudando, urgentemente necesita beber de sus labios carnosos, con aquel inusual color rojo.

"¿Te ha comido la lengua el ratón, cariño?." Susurra, despacio en su oído, tan delicioso, tan íntimo.

Y joder, que el rizado sé ha quedado sin saber que decir. Le mira a los ojos y encuentra el mejor pecado.

Pasan segundos incómodos. "Hola, Louis. Me alegra que estés aquí." Por fin ha encontrado su voz, aunque esté un poco más grave de lo normal. Puede notar que al ojiazul le han temblado las piernas, parece que están en el mismo canal.

Se quedan ahí, solo viéndose, por segundos eternos. Los labios del más bajo se ven más dulces y apetitosos, como si los hubieran puesto solo para él. Quiere probarlos, tiene unas endemoniadas ganas de probarlo, quiere tomarlo por la cintura y follárselo en la primera mesa que encuentre. Quiere degustar aquel cuerpo.

Sabe que no debería estar pensando en eso. Sabe que está mal y eso le eriza más la piel.

Pero solo mirarle la cara, aquella cara bonita, aquellos ojos azules, sus pomposos y apetitosos labios, sus mejillas afiladas con un tono bermellón, sus pestañas tupidas y largas. Realmente quiere saber a qué sabe Louis.

Usualmente, ninguno de los dos lo demuestra, tan temerosos por aquellas miradas, tan destruidos por los comentarios, tan encarcelados.

Dos cuerpos buscando el amor, siendo prisioneros de él mismo.

Pero Harry sabe que Louis está pensando eso, con solo mirar el temblor en sus piernas, con solo mirar el brillo en sus ojos.

Quiere invitarlo a sentar junto a él, dejar el temor por primera vez... Pero luego se da cuenta de que ella está ahí. Tan tímida y hermosa como siempre, con su corto y castaño cabello, con su sonrisa bella. Aquella que solo es por Louis.

Su hermosa prima que tiene la suerte de llamar a Louis como su novio, como suyo. Cuánto daría por eso...

"¿Qué tal, Rouse?" Se siente un poco estúpido al hablar, después de babear por su novio ahí mismo. Le da la mano y ella le recibe.

"Hola, Harry. Todo bien. Louis estaba muy emocionado de venir e igual yo." Su vista se dirige al ojiazul y deja un suave beso en sus labios.

El rizado se siente un poco incómodo y dirige la mirada a otro lado. No quiere admitir que es un golpe a su orgullo, que es golpe al corazón y que lo ha dejado un poco ido.

I'm bored (L.S.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora